La dueña de todos los misterios

(Referentes femeninos VII)

Ignoro si existe algún estudio que evalúe el estado psicológico de las adolescentes que crecen con las lecturas de Agatha Christie entre manos. De momento, no tengo ningún diagnóstico al respecto y lo único que puedo decir es que acumulo un buen puñado de recuerdos nostálgicos protagonizados por una historia de esta señora, que nació un 15 de septiembre de 1890 en Torquay, en Inglaterra, en una familia acomodada, lo que permitió que viajara a lugares exóticos y acumulara sucesos que incorporar a su imaginación.

Cuentan en la página web oficial que mantiene vivo su legado (si es que eso hace falta con la legión de lectores que aún atesoran sus libros), que la madre de Agatha, Clara, que era una excelente contadora de historias, n o quería que aprendiera a leer hasta los ocho años, pero ella, aburrida, decidió "auto enseñarse" a los cinco. Y ahí empezó una historia de leyenda, en la que su imaginación se hizo dueña de todos los misterios.

También ella protagonizó su propia narrativa, con una desaparición legendaria tras una aparente discusión con su primer marido, Archibald Christie, en 1926, justo después de que la escritora publicara el célebre El asesinato de Roger Ackroyd, un libro que ha recibido no sólo las alabanzas de millones de lectores, sino también de la crítica más quisquillosa, por un planteamiento más que interesante, relacionado con la primera persona utilizada en la narración.

Agatha Christie continuó cosechando éxitos editoriales y se casó, en 1930, con el arqueólogo Max Mallowan, un matrimonio mucho más adecuado a su espíritu aventurero. Enumerar sus libros, ni siquiera los más vendidos, sería interminable. La web que antes les nombraba, oficial, ha propuesto un reto para este 2023, con una lista de lecturas recomendadas durante este año, por si les interesa echarle un vistazo a este proyecto.

Por mi parte, le dejo aquí la sugerencia de Las Manzanas, por ningún otro criterio más sesudo que es la novela en la que se ha basado el director y actor Kenneth Branagh, su última adaptación del universo Christie al cine, la película Misterio en Venecia.

La escritora más leída en lengua inglesa fue tan prolífica que, al cumplir los cincuenta, decidió frenar el ritmo y pausar más sus publicaciones. Dicen que murió, entre las miles del éxito y la paz de los años vividos, el 12 de enero de 1976.

No sé si es cierta la autoría de Christie de una de sus presuntas frases más conocida, pero es mi preferida y no me resisto a dejarla aquí:

"Los mejores crímenes para mis novelas se me han ocurrido fregando platos. Fregar los platos convierte a cualquiera en un maníaco homicida de categoría".