Por el profesor Thomas Chacón para Huella Económica.
La economía es considerada como la ciencia de la elección, porque se centra en el estudio de la toma de decisiones para satisfacer necesidades ilimitadas. Para ello es necesario abordar el sentido común, el cual no es más que conocer las consecuencias de las opciones antes de realizarlas.
Sin embargo, a pesar de que la economía es sentido común, se ha vuelvo costumbre verla como una disciplina complicada y llena de conceptos de difícil comprensión; a pesar de que la palabra economía viene del antiguo griego para designar la “administración de la casa”. Es decir, nace para resolver problemas de tomas de decisiones a las que nos enfrentamos a diario y esta de resolver problemas se fue desarrollando de acuerdo al desarrollo humano hasta abordar términos como ventajas comparativas, monopolio, competencia, deuda pública y privada, inflación, deflación, explotación, propiedad, entre otros. Los cuales no siempre identificamos su significado. Y cuando intentamos entender, nos encontramos con explicaciones confusas.
De allí que, a pesar del alto tecnicismo que comúnmente se encuentra entre quienes “estudian la economía”, es posible llevarla a un lenguaje enmarcado en ese sentido común factible a la compresión de cualquier persona, para que conduzcan a la identificación y análisis de opciones, alternativas y decisiones presentes en la vida cotidiana para diagnosticar costos y beneficios entre las distintas opciones.
En medio de esto, durante el siglo XIX el francés Frédéric Bastiat se dedicó a establecer un lenguaje accesible a cualquier persona para entender los fenómenos económicos. A partir de allí se han venido sumando esfuerzos a esta tarea, como la de Manuel Ayau de Guatemala, Martin Krause de Argentina, diversos Bancos Centrales, entre otros.
Incluso los autores mencionados, explican la economía a partir de literatura reconocida, hecho que demuestra que la economía forma parte de nuestra cotidianidad y por sobre todo si puede estar al alcance de todos y con ello se puede incrementar las capacidades humanas de quien se acerque a ella y no solo identificar oportunidades sino contribuir para crearlas.
Es así como la economía ofrece un conjunto de principios para la mejora tanto individual como social, porque ofrece una técnica de pensamiento que ayuda a desarrollar conclusiones correctas que generen riquezas al alcance de todos y a la promoción de a cooperación pacífica para conseguir el intercambio que permita un fortalecimiento constante de la naturaleza humana.