Crónica en la lejanía
Cada vez que se mete en la piel de su personaje, Juan José Pérez García, es jocoso y recurrente, sin distancias ni lamentos," riendo, siempre riendo".
LILIFÓ YALINDO PORTELA Y TODA SU PARENTELA
Jesús Díaz Loyola (ATP)—¿Oiga, usted nunca se va a 'morin'? —le pregunta una fans desatinada. Y Lilifó Yalindo Portela, reencarnada en la inagotable vitalidad de Juanito Panchín, se hace con el escenario, lo domina y se entrega la noche entera.
Lleva años haciendo reír a los públicos mas identificados con su pasado y su presente. Dicen que nació riéndose, tal vez por eso su mayor virtud esté en hacer reír por donde quiera que va.
Lilifó nació en Cuba, se soltó pa'l solar en el Rick's Café y ahora es figura elite del espectáculo en Islas Canarias, España, donde vive su etapa de máximo esplendor. Lilifó no se muere, no se casa, pero tampoco envejece.
ANOCHE, EN CANARIAS OTRA VEZ SE SOLTÓ LILIFÓ
Juan José Pérez García (Juanito Panchin), un consagrado humorista cubano asentado en el sur peninsular español, es el padre que engendró a esta criatura, expresión de la vida marginal de la Cuba más profunda, una enjundia de vicisitudes y placeres.
Con bombos y platillos asomó anoche parrandera y acabó 'botá' pa'l solar' entre maracas, rumba y tambor. Así terminó el sábado Lilifó, el que allá protagonizó, en la Casa Parrandera de San Cristóbal de La Laguna, en Tenerife, Islas Canarias.
Se soltó Lilifó, con su verbo dicharachero tejiendo la vida y las costumbres de Cuba, la de adentro, y de los cubanos de afuera
Cada vez que se mete en el personaje de LILIFÓ, Juanito Panchín es jocoso y recurrente, sin ofensas ni insultos, sin implicar revoluciones, sin distancias ni lamentos, riendo, siempre riendo, porque Lilifó Yalindo es la reencarnación pura y dura del guajiro cubano y de a pie. 'Y no hay más na' caballero'.
Panchín tiene el mérito de ser un fiel exponente del humor aplatanado que ha viajado con el cubano —y con él— toda la vida. LILIFÓ YALINDO tiene tantos años como PANCHÍN. No me equivoco si digo que venía en sus genes y en su musa desde que el 18 de agosto de 1966 nació en la provincia cubana de Sancti Spíritus, Juan José Pérez Garcías, el célebre Juanito Panchín de la noche y el barullo.
Este hombre simple pero inmenso por todo el talento que lleva adentro, tiene la culpa de haber hecho reír a multitudes de personas por donde quiera que va con sus personajes siempre a cuesta.
"Juanito Panchín fue un fibroma mal atendido que nació con la intención de morirse algún día, sabiendo que cada día que pasa es el anterior de mañana y que no hay maltiempo si tienes buena 'capa'." —dice de él, y así va por la vida.
Juanito Panchín hace reír al más distraído, el de cerca y en la lejanía. Los cubanos le siguen a todas partes como un icono de sus vidas y sus costumbres, porque él es la viva semblanza de la CUBA que le tocó, porque mientras dure Fidel allí estará LILIFÓ, dando que hablar y que hacer.
Todavía yo no he vivido un show en estado puro de este artista consumado de la risa y el buen festín que es Juanito Panchín, y ya me descojono, pero lo estoy esperando como manjar en Madrid.
Dicen allá en mi tierra —la suya— que Panchín lo que consiguió se lo ganó, porque como un buey estudió. Digo yo, y así de instruí'a va Lilifó.
SU FORMACIÓN
A muy temprana edad comienza estudios de música en el conservatorio de su pueblo natal y de la mano del maestro Marcelo lamas estudia Guitarra popular y el tres Cubano. En 1980 integra el Septeto Nueva Generación y graba dos LP de música tradicional Cubana: 'Semblanza' y 'La Música Tradicional Cubana por el Mundo'. Fue integrante de La Parranda Típica Espirituana, en Radio Sancti Spiritus estudió locución, incursionó en el mundo de la animación en la Casa de La Trova Miguel Companioni Gómez en la Villa de los Laureles.
En los 90, Juanito se radicó en La Habana y tuvo un paso fugaz, pero fecundo por la Radio y Televisión nacional, actuando en teatros y espectáculos humorísticos. En Canarias integraba el elenco del programa humorístico Pateando La lata que hizo época en el canal 6 de Televisión Cubana.
Ahora Juanito Panchin es un actor y humorista consumado. Su excelencia es capaz de caracterizar y dar vida propia a sus personajes mas diversos que hablan de pasado y de presente: Dominguito Díaz festivos, Seferino Díaz de carreras y Antoñito, pero la más emblemática, sin dudas, se ha vuelto Lilifó.
Cuando cualquiera de ellos toma el escenario, el mayor reto de Panchín es encontrar la risa del espectador desde una sana diversión sin ofensas ni insultos y mucho menos con espíritu de contradicción, "reflexión, mucha reflexión, porque de Sancti Spiritus yo soy", dice Panchín, que con su espíritu va dejando su mensaje de amor y humor. Ayer lo derrochó con la que montó en la Casa Parrandera de San Cristóbal de La Laguna.
En Panchín hay una mezcla de espiritualidad y gozo limpio, de alegría y evasión, como él mismo dice...'El Humor es un servicio para la risa ajena, pues ya hay quienes se encargan de poner las lagrimas'
Su personaje más mimado, Lilifó Yalindo Portela, es una versión modernizada de la mulata cubana de barrio que no se casa nunca y está viviendo del brete. No se ligó a Dominguito ni se casó con Seferino y mucho menos se lió con Antoñito.
Anoche, en Tenerife, reapareció Lilifó, con toda la chusma a flor de labios, contando sus historias de la realidad Cubana, unas veces exagerada y otras mas exacta, pero con la cubana esencia de reírse de sus problemas para seguir adelante y no perder lo que menos cuesta: La Risa. Esa es la gran clave del triunfo del humor de Panchín, desde la picaresca parodia al resbalón en un escalón hasta la singular manera de reírse de la longevidad irreversible de su Coma-andante.
Juanito Panchín es showman, un gurú de la risa por excelencia, que se deshace en cada entrega, desde que sube al escenario hasta que lo abandona, dándole vida a sus personajes y haciendo reír a multitudes enteras.
La de ayer fue una noche parrandera que la montó en La Laguna, cultivando alegría pura desde su 'Humor A La Cubana' con Lilifó Yalindo Portela, su criatura más pendenciera.
Dice la chusma cazuelera que todavía retumban las carcajadas en San Cristóbal parrandera .
En Madrid te esperan mi herma'. ¡A 'vel' cuando es que tú llega!