La Épica del Pollo en Brasas
Publicado el 17 noviembre 2017 por Jmartoranoster
Por: Ernesto Villegas Poljak
Lo de las 30 horas de espera en Miraflores es una licencia de ficción que se permitió Jordi Évole en su relato sobre su entrevista al Presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro.
La entrevista estaba pautada a la 1:00 de la tarde del 30 de octubre y a eso de las 11:00 de la mañana se le informó que por imprevistos de agenda debía postergarse hasta le día siguiente a la misma hora. Él entonces solicito un encuentro casual con el Presidente, el cual fue gestionado de inmediato, siendo trasladado Évole y su camarógrafo al Palacio Blanco, donde se desarrollaba la reunión del Consejo Federal de Gobierno.
Están grabadas las imágenes del Presidente y Évole saludándose en ese contexto. Posteriormente yo mismo, tras remarcarle a él y a su equipo las disculpas de rigor por el cambio de seña, los llevé a todos a comer pollo en brasa en la Posada del Pollo, y de allí al Mausoleo del Libertador, donde se tomaron fotos ante el sarcófago de Simón Bolívar y durante largo rato escucharon las explicaciones de una joven guía sobre los personajes que reposan en el Panteón Nacional.
Todos se montaron muy contentos y de allí se dirigieron a su hotel. De modo, pues, que la imagen de un periodista esperando sentado en una mesa durante 30 horas bajo la lúgubre iluminación que su propio equipo montó para ese encuentro no parece más que un intento por rodear a la entrevista de una épica que no tuvo. Por cierto, Évole hizo comentarios elogiosos del pollo en brasa.