La España de los bajos salarios donde los empresarios sueñan con el despido libre.

El nuevo Gobierno de Mariano Rajoy congelará en 2012, por primera vez desde 1980, el salario mínimo interprofesional (SMI). Esto supondrá pérdida de poder adquisitivo para aquellos ciudadanos que cobren el mínimo legal: a falta del dato de diciembre, la inflación cerró noviembre con una subida interanual del 2,9% respecto al mismo mes del pasado año.
El salario mínimo se situó en 641,40 euros este año. Así, el sueldo quedó fijado en 21,38 euros al día con un cómputo anual que en ningún caso puede estar por debajo de los 8.979 euros. El salario mínimo de los españoles sigue a años luz de Europa. El SMI español es uno de los más bajos de los países de la Eurozona que lo tienen establecido por Ley, tanto en términos absolutos como en paridad de poder de compra, solo por encima de Portugal. El 60% de los asalariados españoles ya cobra menos de 1.000 euros al mes.
Nada desdeñable es la situación de los consejeros ejecutivos de las empresas cotizadas, cobraron un salario medio de 260.215 euros en 2010, lo que supone casi 30 veces el salario mínimo interprofesional (SMI). Así se desprende del séptimo informe anual de la CNMV a partir de los informes anuales de gobierno corporativo enviados por 153 sociedades cuyas acciones cotizan en las bolsas españolas.

Está visto que, aquí no hay narices para poner en vereda los mega-salarios y meter en cintura los excesos pero en cambio se machaca más y más a los que menos tienen, además siguen penalizando a todos por igual sin legislar impuestos progresivos y de paso estrangulando más y más el consumo familiar que al fin de cuentas es el que mueve la máquina para establecer confianza y creación de empleo.
"Desde la CEOE, afirman que las empresas no contratarán si no se abarata el despido". Aunque en los titulares lo quieran maquillar con la palabra "flexibilizar la contratación" en 'petit comité' siempre se acaba deslizando el vocabulario popular.

Decía José Mota en una ocasión que "el humor es la maldad de los mayores dicho con la ingenuidad de los niños".