La Esquinita de Javi nació en un pequeño y acogedor local situado en la Plaza de Mariana Pineda de la capital Granadina. El éxito y el buen hacer de su propietario, Javi, con décadas de experiencia trabajando con el pescado como género principal en algunos de los locales de más renombre de la ciudad, convirtieron a 'La Esquinita' en un lugar donde se sumaron las buenas prácticas de los bares de 'pescaito' de la ciudad con mejoras importantes que marcan la diferencia con el resto de restaurantes especializados en este género. El cambio regular de aceite, estractores de gran potencia que evitan que salga olor alguno de la cocina y la limpieza escrupulosa de suelo y barras. Detalles que han conquistado a locales y foráneos.
El año pasado en La Esquinita de Javi era imposible encontrar un hueco en la barra o una mesa, fue entonces cuando decidieron ampliar espacio y abrir un segundo local homónimo justo enfrente del primero.
La realidad actual es, como el nombre, idéntica. Un restaurante que, a pesar de ser cuatro veces más grande que la Esquinita original, está siempre lleno. El éxito de esta cadena se hace notar en plataformas como TripAdvisor, donde, desde la apertura del nuevo espacio, La Esquinita de Javi ha escalado puestos desde el más absoluto ostracismo hasta el top selecto donde se encuentran el 5% de los mejores restaurantes de la ciudad nazarí.
Los comentarios de los clientes son prácticamente unánimes. Destacan la actitud del personal, la buena calidad del pescado, la excelente ubicación (en pleno centro histórico de la ciudad), la variedad de la carta y el precio. Factores que han convertido a la Esquinita en un lugar de culto para los amantes del 'pescaito' frito en Granada.
De momento La Esquinita de Javi no prevé abrir locales nuevos, aunque "nunca se sabe", dice Javi, propietario de la cadena.
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