Sinopsis Editorial:
Madeleine tiene diecisiete años cuando conoce a Jack Astor; es hermosa, inteligente y de clase alta, pero los Astor están en una liga aparte. Jack es un héroe de guerra y un astuto hombre de negocios. A pesar de su diferencia de edad Madeleine se enamora y se convierte en el objetivo de la prensa.
En su luna de miel en Egipto, Madeleine se siente viva por primera vez y está felizmente embarazada. La pareja planea regresar a casa a bordo del Titanic cuando este choca contra un iceberg. Jack le asegura que pronto volverán a Nueva York, pero el destino tiene otros planes para ellos.
Cuatro meses después, Madeleine, convertida en viuda, da a luz y ante el desastre del naufragio y de su situación, deberá hacer frente al acoso de la prensa. Será entonces cuando deberá tomar la decisión más importante: aceptar el papel que se le asignó o labrarse su propio camino.
Hoy os hablo de un libro que no ha sido lo que yo esperaba, pero creo que la culpita es toda mía, porque leo la palabra “Titanic” y allí que me lanzo sin control. Si la novela se hubiera traducido como se titula originalmente (La segunda señora Astor) seguramente no me habría detenido en ella, peeero… piqué el anzuelo y a pesar de saber que los protagonistas iban a ser los Astor, pensé que el barco tendría más peso en la historia.
La novela nos habla del romance y posterior matrimonio de John Jacob Astor con su segunda esposa, Madeleine Force. En su momento fue portada de todos los periódicos por el “escándalo” que supuso y la verdad es que se sintieron muy acosados en este sentido. Él se acababa de divorciar de su primera mujer y a Madeleine la conoció cuando esta tenía 17 añitos, sacándole casi treinta años de diferencia. Es cierto que ella estaba enamorada de Astor, o al menos es lo que nos cuenta el libro, pero a sus padres solamente les faltó envolverla para regalo de lo encantados que estaban con la elección de su niña. En fin…
Shana Abé
Si tengo que ser sincera y aun reconociendo el trabajo de documentación de la autora y que es una novela muy bien escrita, a mí el romance de los Astor me interesaba lo justo, y estaba deseando que se embarcaran en el Titanic, pero es una parte muy corta en la novela y algo decepcionante, aunque sí llega a transmitir el miedo de vivir un momento como el hundimiento de un buque que todo el mundo creía insumergible y por supuesto el sentimiento de pérdida posterior.Mención especial para Margaret Brown (si habéis visto “Titanic” me refiero al personaje que interpreta Kathy Bates en la película), que también sobrevivió al hundimiento del buque y que es la que más me ha gustado tanto aquí como en la película y por cierto, a pesar de que es fácil encontrar fotografías de los Astor y ya sabía su “final” antes de empezar a leer, todo el tiempo les he puesto a los personajes las caras de la peli de Spielberg 😂😂
En fin, una lectura que no me dejará huella.