Falta de sueño e hipertensión arterial
Según un estudio de reciente publicación por parte de una revista de la Asociación Americana del Corazón la falta de sueño sería uno de los factores en juego en el desarrollo de hipertensión arterial en varones que estén transitando la vejez. Las principales consecuencias negativas que se pueden desprender de la relación entre falta de sueño e hipertensión se concentran en los trastornos sobre las pausas respiratorias que hace una persona con sueño de baja calidad por las noches.
El estudio efectuado por esta institución americana para medir la relación entre falta de sueño e hipertensión analizó a casi 800 hombres de alrededor de 75 años con un nivel de masa corporal intermedio. Este estudio estuvo centrado en seis regiones distintas de los Estados unidos. Para ofrecer resultados más completos en esta experiencia se comprobó la calidad del sueño REM y no REM de cada uno de los sujetos que participaron del estudio, midiendo la oxigenación.
Por lo general, la falta de sueño está asociada a fases REM demasiado breves. Los sujetos que demostraron tener una falta de sueño crónica a los 3-4 años de realizada esta experiencia empezaron a desarrollar hipertensión arterial.
Al analizar el nivel de incidencia de la falta de sueño en la producción de hipertensión arterial, de todas maneras, los investigadores no dejaron de tener en cuenta otros factores que podrían ser de gran importancia a la hora de evaluar los riesgos de una persona de verse afectada por esta afección. Alguien que sigue una alimentación sana de forma habitual (eliminando grasas y sal en exceso todos los días) está en mejores condiciones al momento de obtener una prevención de enfermedades adecuada (incluyendo la hipertensión). Otro factor en juego en el desarrollo de hipertensión pueden ser los niveles de estrés de la persona.