El pasado 30 de diciembre, el doctor Li Wenliang advirtió a sus colegas de la aparición de un extraño virus y, ante la alarma que provocó, su mensaje fue compartido en todas las redes sociales difundiendo su nombre. Días después, miembros de la Oficina de Seguridad Pública acudieron a verle y le hicieron firmar una retractación de todo lo que había dicho.
El oftalmólogo continuó trabajando en su hospital y uno de sus pacientes le contagió el COVID-19. El 6 de febrero falleció, con 33 años, e Internet se colapsó con mensajes de apoyo, condolencias, homenajes y elogios para él.
Un oftalmólogo con un gran compromiso profesional
El Dr. Li Wenliang nació en Manchú el 12 de octubre de 1986. Se licenció en Medicina y, desde 2014, trabajaba como oftalmólogo en el Hospital Central de Wuhan. Falleció dejando a su mujer embarazada de su segundo hijo. Sus padres fueron contagiados y hospitalizados, pero sobrevivieron.
“Demostró ser un gran oftalmólogo, entregado a su trabajo, con un increíble compromiso profesional y se ha convertido en un héroe para una gran parte de la población”, indica Mariángeles Guillamón, portavoz de la Clínica Oftalmológica Novovisión, que también le ha querido rendir un especial homenaje https://www.clinicasnovovision.com/blog/como-empezo-el-coronavirus/
El Dr. Li no violó la ley
Recientemente un partido político, se ha disculpado ante la familia del oftalmólogo Li Wenliang, a quien han exonerado, reconociendo que "le censuraron por publicar rumores, pero que no violó la ley". Y han responsabilizado de esta negligencia a dos oficiales de la comisaría de policía, "por dar instrucciones inadecuadas y seguir procedimientos irregulares".
Por otra parte, el presidente del partido ha reconocido que "la comunicación a través de los medios debe ser más efectiva y que la información sobre la epidemia tiene que ser mejorada".
Asimismo, "ha insistido en la necesidad de salvaguardar la estabilidad social y que las actividades ilegales que perturben el tratamiento médico, la prevención de la epidemia y el orden económico y social tendrán que ser severamente castigadas".
“Sin duda, esta crisis va a hacer replantearse a muchos gobiernos cómo se debe actuar en casos de emergencia, y valorar los beneficios y las desventajas de la transparencia informativa para solucionarlos”, declara Mariángeles Guillamón.
Protocolos y transparencia en emergencias sanitarias
“Los profesionales sanitarios están resultando muy perjudicados por la elevada capacidad de contagio del COVID-19 –añade Guillamón– y están haciendo un sobreesfuerzo por luchar contra la propagación de la enfermedad con escasos medios. La Clínica Oftalmológica Novovisión traslada su homenaje y animo en esta carrera de fondo que se está haciendo”.
Por otra parte, considera que “ahora más que nunca se es consciente de la responsabilidad que tienen los gobiernos de los distintos países de cara a sus ciudadanos y a la comunidad internacional de tener protocolos claros y transparentes de alerta y de actuación en casos de una posible pandemia. Cuando se supere la crisis del coronavirus se tendrá que hacer por parte de todos un análisis retrospectivo de sus responsabilidades y de las actuaciones llevadas a cabo, teniendo en cuenta que en un mundo globalizado e interconectado las enfermedades ya no conocen fronteras”.
Después de esta experiencia, opina que habrá que revisar los errores cometidos con el COVID-19 y tomar medidas para ser rápidos y eficaces en los momentos iniciales de otras emergencias sanitarias que puedan surgir. “Lo que está claro es que se hará todo lo posible para que esto vuelva a suceder”, concluye la responsable de comunicación de Novovisión.