
La definición más clara del bloqueo del escritor es la que nos brinda el libro Colección de Hábitos. Cómo escribir 3000 palabras y evitar el bloqueo del escritor.
El bloqueo del escritor es la inhabilidad del escritor para estar lo suficientemente inspirado, para completar cualquier trabajo nuevo o completar un trabajo actual.
En el caso de la fatiga del escritor, esta suele aparecer cuando nos encontramos entre la palabra 30.000 o 40.000 (Dependiendo de la magnitud de nuestra novela), a mitad de cualquier manuscrito o cuando llevamos demasiado tiempo escribiendo sin parar.La gran diferencia con el bloqueo radica en que cuando se presenta la fatiga no hay ausencia de ideas ni hojas en blanco, en cambio, el escritor conoce a la perfección su novela de principio a fin, simplemente siente que no puede escribir con comodidad y que el resultado no es lo que esperaba. Por esta razón explicaré los principales síntomas, para que sean identificados en el momento oportuno y no seamos sus víctimas.
Todo está mal escrito. (Desde nuestro punto de vista)
He sido lo más decente al describir lo que sentimos para con nuestra escritura cuando estamos cayendo en el problema. Más que mal escrito, tenemos la percepción de que es una completa #$%&%$ (Así no lo sea). Lo releemos y nos damos cuenta de que hemos empleado metáforas, símiles, hipérboles y cuanta figura literaria existe, de manera débil y vulgar. "La blanca nieve" "Tenía el cuello como una avestruz" "Tus ojos son como dos luceros" "No estoy solo pues la soledad me acompaña""Lo he visto con estos ojos que se ha de comer la tierra" "Salió corriendo como una liebre" "Se moría de la risa"
Cuando un escritor entrenado y experimentado empieza a presentar estos baches en su escritura...
Repetición involuntaria
Empezamos a escribir la misma frase una y otra vez, empezamos a escribir la misma frase una y otra vez, empezamos a escribir... y no nos damos cuenta de ello hasta que hemos leído el párrafo unas cuantas veces. Para no ser tan exagerado e ir demasiado lejos, escribimos la misma oración pero de diferentes maneras, que es todavía peor y más difícil de detectar.Por esta razón nuestros personajes, descripciones y situaciones se estancan, dando vueltas sin avanzar en la trama. Todo sin que nos demos siquiera por enterado. Esto no quiere decir que seamos pésimos escritores (bueno, puede que en algunos casos si lo sea). Es un síntoma grave de que estamos fatigados.No avance
La idea es perfecta, la trama más que envolvente y los personajes ni hablar, pero a pesar de que nuestros dedos se mueven por el teclado como peces en el agua (que mala comparación) y llevamos horas trabajando, no salimos de la página 34.576. Mejor dicho, tenemos la percepción de que no avanzamos.Detector de errores apagado.
Al volver a leer lo que hemos escrito dejamos pasar crasos y verdaderos errores, pero en cambio detectamos fallos insignificantes e inexistentes que nos conducen a la misma conclusión: hemos escrito %$$###% basura.Forzar las palabras
Escribimos pero prevalece la sensación de que nuestras ideas no son las que aparecen en aquellos crueles renglones, en cambio, continuamos usando esas débiles y vulgares figuras literarias con una facilidad increíble. Por más que lo intentamos (En verdad lo intentamos) solo escribimos $#%#& y cada palabra es forzada. Por si fuera poco repetimos las mismas frases una y otra vez, las mismas frases una y otra vez ¿Ya no había hablado de esto antes? Son las 11:28 p.m. ¿Será posible?
Si esto te sucede, no es tu culpa. Bueno, si lo es. Son señales que nos indican que algo anda mal en nuestro cuerpo y que debemos detenernos, o solo conseguiremos aumentar el sinsabor que este estado produce.