La feria.

Nuestros políticos siguen actuando como si este país fuese una feria y entre ellos compitiesen por el numerito o la atracción más ruidosa.

Los últimos datos del EPA (Encuesta de Población Activa) reflejan un aumento del empleo que sin duda es una muy buena noticia, aunque sea un aumento que se da cada año al inicio de la temporada turística, pero esta vez con cifras de record, que de cualquier forma, como siempre, por más que sean muy positivas, no se tendrían que dar por buenas hasta conocer las cifras, normalmente negativas, del fin de la temporada, en Octubre.

Pero esto es más que suficiente para que Rajoy se ponga una vez más a mentir y lucir sus inmensas habilidades y denigrar a los gobernantes del resto de Europa afirmando con toda rotundidad que nadie le supera en resultados superlativos. El jueves 23, solo minutos después de conocer la noticia, entre otras mentiras y barbaridades, soltó “Fuimos los mayores destructores de empleo de Europa y ahora somos los mayores creadores de empleo”. Todo falso. El principal destructor de empleo de Europa en la primera mitad de la crisis y a nivel de Tasa de desempleo, que es el criterio que se utiliza para comparar países, no fue el gobierno Zapatero sino Grecia, y por mucho, y aunque es probable que gracias a las últimas cifras durante algunas semanas y quizás un mes España haya sido uno de los mayores creadores de empleo de Europa, las del gobierno Rajoy están muy lejos de ser un ejemplo de eficaces políticas de empleo, y lo son más bien de lo contrario. ¿Cómo se atreve a ponerse medallas por la creación de empleo el Presidente del gobierno de un país que en plena crisis ha alcanzado una tasa de paro cercana al 27%, que todavía está solo a unas décimas del 24%, que todavía casi dobla por poco el promedio de la U.E., que está a ocho puntos del que le precede que es nada menos que Chipre, país rescatado que padece todavía una tasa de paro del 16%, y a muy poca distancia, un par de puntos, de la tasa de paro del desastre griego, aquel desastre que según Rajoy hemos de evitar votándole a él?, ¿Cómo puede ponerse de ejemplo por delante del Reino Unido que en plena crisis llegó a una tasa de casi el 13% y hoy está justo debajo del 5%, o de Islandia, que aunque tiene la inmensa suerte de no pertenecer a la U.E., al inicio de la crisis se hundió económica y financieramente, su tasa de paro llegó al 18% y hoy está en el 3%?. Solo hay una explicación, Rajoy confía plenamente en la estupidez de sus votantes y en consecuencia puede soltar la más gorda de las mentiras que se la tragarán como corderitos, y le seguirán votando encantados y ofendidísimos de que haya quien no vote por él. ¿Cómo no va a ser este un país plagado de idiotas cuando una de las mayores audiencias de todos los medios de comunicación es para los sucesivos culebrones de la Pantoja en la cárcel?

Para completar el cuadro de cinismo y mentiras Rajoy añadió, sin haber tenido por supuesto tiempo para analizar las cifras, cosa que por otro lado a un deshonesto falsario le da igual, que el aumento record se había producido de manera equilibrada entre zonas y sectores. Es decir, su gestión es tan fantástica que deben callar las lenguas malintencionadas que achacan la mejora a la temporada turística cuando la han disfrutado todos los pueblos de España y todos sus sectores económicos. Falsedad de record y vuelta al ruedo. La creación de empleo de record se concentra en casi su totalidad en Andalucía, Baleares, Catalunya y Comunidad Valenciana, zonas donde tengo entendido que también se concentra buena parte del turismo del país, y por sectores económicos el turismo también es muy mayoritario en todas las zonas mencionadas excepto en Catalunya, aquella CCAA cuyos gobernantes están preocupados por cosas que no tienen nada que ver con la mejora de las condiciones de vida de su ciudadanía, donde también ha crecido considerablemente la creación de empleo en la Industria, y esta, que si es una muy buena noticia no ligada a la temporalidad del turismo,  Rajoy no la menciona por tratarse de los apestados.

Los barceloneses tenemos una gran ventaja: por más que en toda España cantidad de políticos se pasen el día diciendo y haciendo burradas, si queremos cubrir nuestra capacidad de recepción de burradas nos basta con escuchar y ver solo lo que dice y hace nuestra mediática Alcaldesa, y ya es mucho más que suficiente. En Barcelona hay dos gestores públicos que a estas horas deben estar contentísimos con los numeritos de nuestra Alcaldesa. Se trata de Santi Vila, Conseller de territorio y sostenibilidad  de la Generalitat y Sixte Cambra  presidente del puerto de Barcelona, que llevan años luchando dura y seriamente con la Ministra de Fomento Ana Pastor y sus continuos incumplimientos en obras fundamentales para la ciudad y la Comunidad, y coincidiendo con el inicio de los trabajos de al menos una de esas obras, sin avisar, como hace ella siempre las cosas, sin encomendarse ni a Dios ni al diablo porque son los demás los que tienen que coordinar con ella y no ella con los demás, la Sra. Alcaldesa decide pegarle un rapapolvo y hacerle un feo a la Sra. Ministra porque en su opinión la obra que inauguran, la nueva línea ferroviaria para conectar la ciudad y el aeropuerto, la llamada lanzadera, no es prioritaria.

¡¡Que suerte tenemos los barceloneses!!, nuestra magnífica Alcaldesa ve cosas que no ve absolutamente nadie más, y se ha dado cuenta de que Londres tiene tres aeropuertos cada uno con su lanzadera, Paris tiene dos aeropuertos cada uno con su lanzadera, que además cientos de miles de londinenses y parisinos padecen la inmensa desgracia de verse obligados a vivir muy bien por culpa de la peste del turismo, y precisamente por todas estas razones quiere librar a nuestra querida ciudad del terrible mal del turismo que ya está muy arraigado y estamos sufriendo estoicamente sus gravísimas consecuencias en forma de vil y apestoso dinero. Por esto paró la barbaridad de construir hoteles, sobre todo de cuatro y cinco estrellas, ¡haaaaaag! ¡que asco!, y ahora con toda lógica hace lo posible para que no se construya la lanzadera, porque sin duda su gestión va a tener éxito y conseguirá acabar con la peste del turismo en Barcelona, y entonces, ¡nos habremos gastado el dinero en una linea infrautilizada!.

La Colau es una gran especialista en lo que yo llamo revoluciones Low Cost, que no aportan nada nuevo, cuestan poco o nada y arman mucho ruido mediático, como la estupidez de cancelar el palco del Liceo porque es un privilegio, olvidando que también lo utilizaban visitantes ilustres de la Ciudad y que con un poco de la imaginación que no tiene la Colau se podía haber utilizado para que puedan ir al Liceo barceloneses que nunca lo harían, aunque como que no hay nadie más ilustre que la Alcaldesa, a la que lo que se hace en el Liceo le importa un bledo, la cosa finalmente tiene su lógica. Y también como lo sumamente revolucionario de retirar el busto de Juan Carlos I y signos monárquicos del Ayuntamiento, que me da absolutamente igual, pero con lo que le gusta a la Alcaldesa establecer prioridades, mira por donde cargarse el busto del antiguo Rey es mucho más prioritario que construir cualquier cosa que se parezca a un hotel en la ciudad.

Ayer viernes 24 se celebró un pleno extraordinario del Consistorio que se suponía que tenía que discutir sobre lucha contra la pobreza, el turismo y las terrazas de bares, pero que lógicamente acabo discutiendo sobre el busto real, pero en mi opinión empieza a estar claro que los que llevaron a Colau a la alcaldía están empezando a dudar de la bondad de su decisión. Antes del pleno tanto Bosch de ERC como Collboni del PSC exigieron a Colau que concretase que es lo que entiende por lucha contra la pobreza porque la información que habían recibido hasta entonces era como muy nebulosa. En las conclusiones del pleno Bosch manifestó que le exigía a la Alcaldesa que en seis meses pueda haber estudiado ya su plan de ayuda a la pobreza, con su presupuesto detallado incluido, y lo hizo además recalcando que lo exigía precisamente porque está a favor de la lucha contra la pobreza. Collboni fue todavía más directo y eficaz, se limitó a exigir a la Colau, con otras palabras más formales,  menos numeritos mediáticos y más gestión municipal.

Pero para numeritos los de la lista de izquierdas que compite con la de Mas para el 27-S, algo así como la repetición de Barcelona en Comú, pero para la presidencia de la Generalitat, que aparte un nombre sencillito “Catalunya si que es pot”, han nombrado primero de la lista a Lluis Rabell, Presidente de la Federación de Asociaciones de Vecinos de Barcelona, precisamente el personaje que fue el único, fuera del sector hotelero, que manifestó su inmensa alegría cuando Colau paró cualquier cosa parecida a un nuevo hotel en Barcelona, que por lo que comprobé en su día son una organización que tiene mucho de grupo de presión paralelo al poder elegido en las urnas, y muy poco de organización de base democrática porque funcionan de manera parecida al extinto Presídium soviético, y otro que, como Colau, hace poco afirmó que nunca se metería en política.

Estas Asociaciones de Vecinos en Barcelona tienen una peculiar mentalidad, se autocalifican de izquierdas y creadas para defender al pueblo y exigir las necesarias mejoras sociales en el barrio, pero curiosamente se oponen, yo me atrevería a decir que de manera casi sistemática, a cualquier inversión medianamente importante que se realice en su barrio, sea inmobiliaria, industrial, comercial o de cualquier otro tipo, con una mentalidad que de imponerse empobrecería al barrio rápidamente, aunque por supuesto ellos seguirían exigiendo empleos y mejoras sociales, pagadas no se sabe por quién.

Aparte que creo que con Rabell los de “Catalunya si que es pot” se equivocan y mucho. En Barcelona no tienen la batalla ganada ni de lejos, y en el resto de Catalunya, aparte que CDC y ERC están mucho mejor asentados que en la capital, el hecho de ser vecino de Barcelona frecuentemente no está muy bien visto, por lo del centralismo, y en muchos lugares nos ponen incluso motes, y resulta que este señor tiene una tarjeta que recuerda a quien se le haya olvidado, que es vecino de Barcelona, y de los importantes.