"Si en 2007 un 82% de los ciudadanos afirmaba sentirse satisfecho con su vida, ahora el porcentaje de personas que se consideran felices ha bajado al 54%. Para el investigador, en nuestra búsqueda de la felicidad hay varias conclusiones que podemos extraer de este estudio: "El primer requisito de la felicidad es formar parte de un equipo. De la soledad no viene nada bueno. El segundo es el control de la propia vida. Tener el sentimiento de que lo que estás haciendo vale la pena y controlarlo"....aquellos que tienen pareja, un empleo y viven con sus hijos tienden a declararse satisfechos con su vida.....Sin embargo, el cambio en nuestras prioridades es uno de los aspectos que más ha evolucionado.
Mientras que en 2007 la salud era lo más importante para el 37%, el amor para el 32%, el dinero para el 17% y otros aspectos para el 14%, en 2013 el orden es economía-salud-amor-otros." http://www.elmundo.es/elmundo/2013/10/09/Bueno, pues evidentemente aquí cada uno saca sus propias conclusiones. Pero yo ya tengo las mías. La primera es que realmente este es el mayor indicador de que estamos en crisis. No porque lo diga este señor, si no porque si realmente este resultado es el reflejo de la sociedad....mal vamos.
Estoy en un momento de mi vida en el que vivo cual hippy drogada, voy japiporlalaif como si acabase de fumarme 20 porros de un atracón. Y es que estoy absolutamente convencida de lo afortunada que soy por lo que tengo y por lo que no tengo.
A ver, seamos serios, no creáis que de verdad me he fumado algo raro y que no soy ambiciosa. Por supuesto que me encantaría salir más,irme de viaje con mi marido, poder visitar a mis hermanas que viven en el extranjero, poder comprar más, poder vivir más relajada, tener un horario mejor, disfrutar más de mi trabajo, sentirme realizada, estar más con mis hijos, etc etc etc. Por supuesto que hay cosas en mi vida que me gustaría borrar/cambiar/mejorar, mías y de los míos.
Pero somos muy básicos, los humanos, y al final, se trata de ver lo que hay a tu alrededor, echar un ojo, dejar de mirarte el ombliguín por un momento y pensar, sólo por instante, en todas las personas que no tienen nada de eso, o mucho menos que tú. Es triste, porque parece que tengan que recordarnos con una desgracia lo bueno que tenemos, pero es realmente efectivo.
El dinero, efectivamente es necesario, y me lo gasto muy a gusto. Pero para mí, es un medio para conseguir un fin, conseguir tranquilidad y poder dar a mi familia lo que necesita y se puede pagar. Está claro que esto lo digo desde una situación que no es de necesidad en mi casa. los dos tenemos trabajo, casa, coche...en fin. Quizá una persona que no esté en mi caso, lo vea de otra manera.
El amor....es un imprescindible en mi vida. Sin él, no podría vivir. Sin esas personas que son mi pilar, mi base...yo no sería yo. Y cada vez es más fuerte, más grande y mejor. A algunas las tengo a mi lado cada día, a otras de vez en cuando, a otras lejos....pero físicamente, porque en mi cabeza están todas estas personas aquí al lado. Es cierto esto que dice Punset, de que nos gusta formar parte de un equipo, lo necesitamos.
Pero hay algo en lo que me gustaría entrar un poco más: la felicidad de todos no tiene por qué encontrarse en el mismo sitio. No tienes por qué ser madre/padre para encontrarla ni tienes por qué tener pareja. Yo creo que se trata más bien de sentirte bien contigo mismo en el momento concreto, con lo que eres y tienes en ese momento. ¿Que no estás satisfecho porque aspiras a otra cosa? Pues genial: busca, compara, elige, trabaja por ello. Nadie dijo que fuese fácil, pero ahí estamos todos, buscando, de una manera o de otra.
Y, finalmente, la salud.
Hasta hace dos días me parecía un dicho de viejas de portería eso de "sin salud no somos nada", "lo importante es la salud"....Yo pensaba que eso eran tontadas de abuelos, porque lo importante eran otras cosas. El amor, por ejemplo. Bueno, pues la realidad, como siempre, te da bofetadas cuando menos te lo esperas, y te haces consciente de que más sabe el diablo por viejo que por diablo. Porque tú puedes tener mucho amor en tu vida, comprarte muchas cosas porque estás en una situación económica desahogada, pero hay cosas que no se pueden comprar. Y una es la salud.¿Qué haría yo si uno de mis hijos o mi marido enfermase de algo muy grave? ¿De algo incurable? O mis padres. O mis hermanas. O yo.
A mí me ha hecho pensar. Y mi conclusión es que cada día voy a intentar ser más y más feliz.
Aunque no me patrocine la chispa de la vida
;-)