En relación con la situación en Grecia, con el muy probable ganador de las inmediatas elecciones amenazando con que se va a cargar la austeridad y la deuda externa, el Ministro alemán de Economía, Schauble, ha manifestado que Berlín (es decir la Loca) esta vez no va a oponerse a que Grecia abandone la Eurozona, porque ahora, al contrario que en el 2010, podría hacerse sin grandes riesgos para el Euro. Esta opinión fue posteriormente corroborada por la propia Loca de Berlín. Este señor y su jefa no solo son estúpidos, además se creen que todos somos idiotas perdidos porque si les quedase el más leve rastro de honestidad tenía que haber dicho ”En el 2010 no declaramos a Grecia en quiebra y negociamos su salida del Euro y probablemente de la U.E., pero no lo hicimos porque cometimos un enorme error que provocó una gravísima crisis en toda Europa, en especial en el sur, y cuatro años catastróficos para Grecia que ahora deberán reiniciar, sino que lo hicimos porque en aquel momento la mayor parte de la deuda griega estaba en manos de bancos alemanes, mientras que ahora, gracias a la labor de nuestros hombres de negro de la Catastroika es la U.E. quien sostiene el grueso de la deuda griega, muy repartida por toda Europa, mientras nuestros bancos han rebajado sus riesgos griegos a niveles más que soportables, y por eso esta vez no nos opondremos a que Grecia salga del Euro, en ningún caso porque ahora vaya a ser más fácil que en 2010.”. Por si alguien no lo recuerda la Loca de Berlín se ha negado sistemáticamente a que se aplicasen a bancos alemanes las pruebas que se han aplicado a los bancos de casi todos los países de la Eurozona desde el 2010.
En mi opinión con estas declaraciones queda demostrado de manera clara y diáfana que a la Loca de Berlín lo que es la U.E. en sí y los países de la Unión que no son de influencia germánica le importan un bledo y medio, y que impuso a la U.E. un inmenso error con el rescate de Grecia y poniéndonos a todos un corsé a base de limitación en los déficits presupuestarios, y con la U.E. controlando que pagos se incluían en los presupuestos, solo para asegurarse que los bancos alemanes no iban a tener problemas de cobro de sus préstamos en el sur de Europa, y si de esta forma los países de la U.E., tanto del sur como del norte, iban a tener una crisis más larga y más profunda que el resto del mundo, le importaba exactamente nada de nada. Si alguien no está de acuerdo con esta opinión, que compare la evolución de la crisis en la U.E. con la de los U.S.A. y la de los países europeos afortunados, es decir, los que no pertenecen a la U.E., Islandia incluida, y se convencerá. Y si alguien piensa que si no formásemos parte de la U.E. no habríamos dispuesto de fondos europeos para el rescate bancario, la respuesta es que en ese caso habríamos tenido la suerte de poder hacer lo mismo que Islandia: dejar quebrar a los bancos, nacionalizarlos y meter en la cárcel a los banqueros negligentes y corruptos, sin que la operación costase un centimo a los ciudadanos, y ahora estaríamos como Islandia, recuperándonos de la crisis de forma clara, sin fragilidades y con una tasa de paro que no llega al 4% y que España no alcanzará jamás a menos que cambie casi todo y que en nuestro caso no da ni para representar al absentismo laboral.
¿Quién necesita a tipejos así como socios?. Egoístas patológicos y encima estúpidos. Lo que me irrita más de esta cuadrilla de la Loca de Berlín es que hablan y actúan con total prepotencia, como si hubiesen inventado la gasolina y su invento funcionase de maravilla, cuando hace tiempo que las pruebas de su estrepitoso fracaso son más que evidentes y suficientes, que además no afecta solo a la U.E. sino que ha alargado y dificultado la salida de forma clara de la crisis en todo el mundo. Aunque entra dentro de lo posible que en el futuro la U.E. tenga por líder dominante a un/a alemán/a que realmente gestione adecuadamente los intereses de toda la Unión en vez de dedicarse exclusivamente a proteger los intereses de los que le rodean, utilizando a su antojo a los demás miembros de la Unión, aunque sea a base de mandarlos al desastre, siempre existirá el riesgo de que aparezca otra Führer Adolfa Merkel (¡Huy perdón!, creo que se llama Angela, la angelita), que de nuevo use a los demás de comodines y que como la actual Führer sepa tanto de economía como de las distintas suertes del toreo, y por esto una vez más voy a decir que, si no aparece un superman o superwoman capaz de darle la vuelta rápidamente, deberíamos salir de la U.E. y la Eurozona como quien huye de un edificio en llamas o de una bomba que puede estallar en cualquier momento, y pasar a formar parte de los países europeos que van muy bien, es decir, los que están fuera de la U.E., y si la expulsión de la U.E. tendría que ser una de las consecuencias de la independencia de Catalunya ¡¡¡Visca Catalunya lliure i independent!!!, sino pediré la nacionalidad británica para poder votar en referéndum la salida pitando del manicomio U.E.
Por cierto, Joseph Stiglitz, el más keynesiano de los premios nobel de economía de los últimos años publicó recientemente un artículo que han reproducido periódicos de todo el mundo donde califica medidas económicas como las utilizadas por Merkel-U.E. como ‘Estupidez Económica’ (Economic Estupidity), y por supuesto que le doy la razón en primer lugar porque llevo años usando el mismo calificativo para las mismas medidas económicas, y en segundo lugar porque quien no lo quiera ver es que es ciego. La última frase del artículo dice “The big problem facing the world in 2015 is not economic. We know how to escape our current malaise. The problem is our stupid politics” (el gran problema con que nos enfrentamos en 2015 no es económico. Sabemos cómo se cura la enfermedad. El problema son las políticas estúpidas).
Aunque espero que no sea así, si el día 25 empieza una nueva fase de problemas europeos cuando los anteriores todavía no están del todo solucionados, los culpables no serán la izquierda y Siriza, ni tan solo los griegos, sino la Führer Loca de Berlín y sus SS.