La gascuña francesa

Con la noche encima comenzó a refrescar, venimos del calor de Madrid y aquí la temperatura es muy agradable, que maravilloso debe ser aquí el verano. El resto del día es historia, traslado a nuestro apartamento y a dormir. Mañana entraremos a Francia y comienza la segunda parte del viaje.

Lunes 2 de septiembre de 2013, Vitoria-Auch.
Despertamos temprano, desayunamos, y nos lanzamos a la carretera, nos esperan 370 km, no parecerá una presa excesivamente difícil pero el gps nos jugó una mala pasada y nos llevó por el camino más largo, así que, ahí va un consejo, una vez cruzada la frontera tomad la A64 dirección a TARBES, es el camino más corto, por cierto, preparaos a pagar unos cuantos peajes, son inevitables.
Lo bueno de viajar en coche es que puedes apreciar lentamente los cambios de paisaje. Uno sabe que ha llegado al Gers cuando comienza a ver campos de girasoles. Como si de un cuadro de Van Gogh se tratase. La carne se pone de gallina, vastos campos limitados por pequeños pueblos de arquitectura interesante e historia plomiza. Así se podría definir a ésta región tan poco conocida y tan cercana a la vez.
No tuvimos excesivos problemas en encontrar nuestro alojamiento a pesar de encontrarse en una zona muy rural y muy aislada, se trata de Les Chalets des Mousquetaires, unas cabañas situadas en un complejo similar a un camping, con piscina y todo. Una cosa os diremos, no debe de haber muchos sitios mejores que éste para alojarse y recorrer el Gers, son una pasada, está súper equipados, ideal para familias, pero lo mejor de lo mejor es el precio.

Vaciamos el coche (llevamos muchos víveres) comimos algo y comenzamos a explorar la Gascuña Francesa. Nuestro alojamiento está situado a 13 km de Auch, que es la ciudad más grande y capital del Deparatamento del Gers.

Auch es uno de esos lugares con relativo encanto, mitad pueblo mitad ciudad, su encanto radica en el entorno del río y en su casco histórico. Tiene un conjunto arquitectural prestigioso cuyo tesoro es la Catedral Santa María,muy recomendable, también no os perdáis la Escalera Monumental, de la Prefectura (antiguo palacio arzobispal) y de la Torre de Armagnac que se destaca.

Tal como describe la web de turismo de Auch auch-tourisme, "La ciudad se extiende por ambas partes del río Gers: orilla sur, la parte medieval alrededor de la catedral; orilla norte, en la llanura las construcciones de los siglos XIX y XX bordeando avenidas amplias abiertas hacia el exterior" . Pues efectivamente, si ya lo ha dicho otro porque vamos nosotros a inventarlo.

Auch puede verse en media jornada, allí en las escalinata que hemos nombrado y que une prácticamente la catedral con el paseo del río se encuentra uno de los pocos símbolos que recuerdan que estamos en la tierra de D´artagnan. ¡qué personaje éste tan interesante! Cuantas veces no habremos sido participes de sus aventuras. El mundo necesita este tipo de alicientes para ser más interesantes ¿no creéis?.

Auch es también un buen lugar para que aprovechéis si queréis hacer compras de cualquier cosa ya que en el resto de pueblos con interés de la zona únicamente suele haber pequeñas tiendas de comida, bueno y panaderías -boulangerie- que están por todos lados. Cristino no podía evitar entrar en una cada vez que se la encontraba de bruces, y es que pan no es lo único que venden, cuidado los golosos, a Cristino ya le conocen por allí como el REVIENTA BOULANGERIES je je.

En fin, como suele suceder en estos casos la tarde se nos pasó rápidamente, regresamos a nuestro alojamiento y disfrutamos de una magnifica cena en el porche de nuestra cabaña mientras que un cielo cubierto de estrellas nos vigilaba. Podríamos estar aquí semanas únicamente en estado contemplativo, solo por el alojamiento a merecido la pena venir. Con las vistas desde nuestro porche nos despedimos hasta mañana, que nos espera un día nuevo cargado de ilusiones.

Martes 3 de septiembre de 2013, Lectoure, Condom, Forcés, Montreal, Larresingle, Cassaigne.
¡Qué placer terrenal despertar en medio del campo! Rodeados de campos repletos de girasoles, sin coches, sin ruidos, únicamente el graznar de algún pajarillo. Sí, así es la dura vida del Gers. Hoy comenzamos a visitar un anagrama de pueblos interesantes que componen toda esta región. Hemos decidido repartir la ruta por zonas, hoy comenzaremos por el norte así que visitaremos varios pueblos y lugares que se encuentren próximos entre sí.

Situado en lo alto de una pequeña colina, tendréis oportunidad de encontrar rincones con buenas vistas. Antes de continuar sabed que junto a la catedral se encuentra la oficina de turismo en la que hablan español, allí encontrareis información de toda la región con una atención muy amable. Por lo demás solo cabe recomendar que lo mejor es que os pateéis todo el pueblo porque todo tiene su encanto, la arquitectura es singular en toda la zona, lo viejo se mezcla con lo nuevo. Existen buenos restaurantes y tiendas con embutidos y dulces típicos de la zona (esto se repetirá en prácticamente todos los pueblos).

Así que aparcamos y pateamos el pueblo, de gran recuerdo la Catedral de St Gerváis que nos dijeron era de los siglos XV y XVI cuya entrada es gratuita -lo cual se agradece-, el antiguo palacio episcopal, la fuente de Diane que es del siglo XII y algún que otro palacete y torre. También digno de recordar el pedazo de pastel de chocolate que Cristino se apretó entre pecho y espalda a media mañana. Por cierto, este pueblo (como mucho de los que visitamos) forma parte del Camino de Santiago.

CONDOM
Dejamos atrás Lectoure y tomamos rumbo hacia el Noreste, concretamente hacia Condom, uno de los pueblos más importantes de la región después de Auch. Un lugar de gracioso nombre pero cuyo interés resulta igual o superior al de Lectoure.

Aparcamos el coche sin problemas y nos dirigimos al centro del pueblo donde se sitúa la Catedral Pez de San Pedro que es del siglo XVI, muy lustrosa y también gratuita. Con el calor del mediodía se agradece entrar en las iglesias donde casi siempre hay una temperatura ambiente que te permite tomar un suspiro y descansar un poco.

Como decimos la catedral es deslumbrante, hace las veces de icono de lo que sería la plaza del pueblo, rodeada por restaurantes de comida típica con menús para turistas algo más elevados que en otros lugares (bueno es que es bastante turística). Encontrareis en el exterior una estatua dedicada a los tres mosqueteros y Dartañan en la que seguro o haréis una graciosa foto para el recuerdo.

En Francia se come antes que en España y cuando uno está visitando pequeños pueblos se puede encontrar con todo cerrado (esto no es París) así que al ser cerca de las 2 nos ponemos a buscar un restaurante con un menú aceptable. Lo encontramos, por unos 16€ teníamos un menú completo con primero, segundo y postre. El primero consistía en una especie de buffet libre de ensalada y algo para picar, del segundo nos llamó la atención la pularda (que es una especie de gallina). Cristino no pidió menú, y es que aunque hacía mucho calor no podía de dejar de probar el famoso casole, un plato que recuerda a nuestra fabada pero con salchicha fresca, pato etc. Vamos que si podéis no dejes de probarlo.

Tras la frugal comida comenzamos a explorar de verdad Condom que cuenta con varias opciones turísticas, existen planos guías por todo el pueblo que te indican una ruta por los principales monumentos, entre ellos se encuentra una pequeña antigua cárcel y hasta 7 iglesias, además de algún museo. La anécdota sucedió al poco de comer al entrar en una iglesia vimos que estábamos montando una exposición de pintura, un señor muy amable nos invitó a pasar. Se trataba de una exposición de pintura sobre Georgia. El señor super amable aunque vió que de francés ni papa, comenzó hablarnos entre francés-ingles y nosotros a contestar entre español-ingles y lo curioso de las cosas es que cuando 2 partes quieren uno se entiende a las mil maravillas. Nos estuvo explicando como los Rusos habían "masacrado" a su pueblo en distintas fases de la historia, nos contó cosas del pueblo Georgiano,- vimos grandes paisajes por cierto- vamos que nos pico la curiosidad. Nos contó también que fue de los primeros países del mundo en que la mujer pudo votar, en fin, a veces uno recuerda los viajes por estas cosas más que por los monumentos o lugares.

MONTREAL-DU-GERS
De este lugar habíamos también leído que era de los pueblos más bellos de Francia. Pues, en fin, nosotros todavía estamos intentando encontrar el por qué, pero bueno lo dejamos a vuestra elección. Eso sí compramos un queso estupendo en la plaza del pueblo para la cena je je.

A pocos kilómetros de Condóm se encuentra este curiosísimo lugar, bajo ningún concepto se debe descartar este lugar de cualquier ruta, por dos motivos: se visita en apenas 1 hora y es un pueblo que es un circulo, sí sí como un donut, es un lugar curiosísimo. De hecho está clasificado entre los pueblos más pintorescos de Francia, toda la plaza es circular y leímos que las casas que allí se encuentran son del siglo XIII y XIV.

Eso sí, hoy en día transformadas en tiendas para turistas en las que ya que estábamos compramos algo de vino francés para la cena, también recibimos algo de información sobre el famoso Armagnac, licor típico de la zona y que recuerda un poco a nuestro pacharán pero más fuerte. Probadlo, quizás os guste.

LARRESINGLE
Aquí sí que sí, impresionante lugar, se visita en media hora pero merece la pena, se trata de un pueblo fortificado del siglo XIII, arquitectura medieval estupendamente conservada. La verdad la sorpresa fue increíble, parece mentira, es como si un diamante estuviera oculto a los ojos de los turistas.

Llegamos en pleno atardecer, con el comienzo de la puesta de sol, la calma y belleza del lugar nos dejó pasmados. Es de esos lugares que seguramente todos los franceses conocen pero que no llega al turismo de grandes masas. Por eso no podéis perdéroslo bajo ningún concepto.

CASSAIGNE:
Con la tarde ya muy encima llegamos a este pueblo famoso por sus vinos, concretamente -según leímos- Floc de Gascogne y como no el Armagnac. Por cierto a la entrada del pueblo encontramos un montón de "cervatillos" cercados en una espaciosa finca.

Por lo demás cuando llegamos allí era como si hubiera habido una fiesta pero ya se hubiera ido todo el mundo ¿por qué? Pues porque no vimos ni un ser vivo en el rato que estuvimos allí, estaba todo cerrado. Pero os lo recomendamos ya que os encontraréis con el Castillo de Cassaigne que se conserva en un estado envidiable.

Después regresamos lentamente a nuestro alojamiento, parando en alguna plaza de algún desconocido pueblo que llamaba nuestra atención. Quizás no lo hemos citado suficientemente , lo mejor del Gers es cuando te trasladas de un pueblo a otro y puedes contemplar los bastos campos de girasoles, la tranquilidad y belleza de los maizales y en fin.....que nos ponemos cursilones..... el día termino con otra cena bajo las estrellas.

Miercoles 4 de septiembre de 2013, Lavardens, Jegun, Lupiac, Bassaues, Montesquie, Tilliac.
Otra plácida mañana en la que despertar resulta por si solo un placer. Rodeados por naturaleza, desayunar en el porche de nuestra pequeña cabaña resulta delicioso.
Hoy la ruta está planteada hacia el Oeste del Auch, tenemos varios puntos previstos pero no sabemos si podremos con todos, así que decidimos priorizar y comenzamos por:

LAVARDENS:
Sin duda unos de los puntos clave de la ruta y que resulta imprescindible en el Gers. Se trata de un pequeño pueblo en el que se encuentra una fortaleza militar que por lo visto perteneció a los Condes de Armagnac. A partir de ahí la fortaleza ostenta toda una historia que pasa por tener diferentes propietarios y que aquí no os reproduciremos porque ya tenéis las guías o Wikipedia (no vamos de copi-pegas como mucha gente je je).

Eso sí, la fortaleza es aproximadamente del año 1100 y se conserva en un estado impecable. Se encuentra en el punto más alto del pueblo. Se puede visitar por dentro pero el precio es alto por lo que nosotros decidimos que NO la visitaríamos.

El resto del pueblo tiene su propio encanto, calles empedradas, restaurantes pintorescos etc etc. Vamos que uno podría pasarse un fin de semana relajado por aquí.

JEGUN:
Siguiendo la carretera rumbo Oeste desde Lavardens enseguida llega uno a Jegun, cuyos encantos principales son; primero, su ubicación en lo alto de una colina que permite realizar estupendas panorámicas y en segundo lugar el Castillo de Lescout, la iglesia románica Sainte-Candide y una casa del renacimiento en la que por lo visto vivió Enrique IV.

Se ve todo en un pis pas ya que el lugar es muy pequeño pero no dejéis de visitarlo que las vistas merecen la pena.
LUPIAC:

Este lugar es también imprescindible en una visita por la Gascuña ¿por qué? Bueno básicamente porque aquí nació y vivió D´artagnan. Además en el pueblo hay referencias constantes a los personajes que creo Alejandro Dumas. Respecto al lugar, bueno, lo encontramos totalmente desértico. Hay una plaza central con soportales que es muy amplia y que resulta agradable de pasear. Allí compramos una barra de pan para la cena. Después tuvimos que comprar otra porque Cristino y Carmen pellizquito a pellizquito acabaron prácticamente con ella ja ja . pero bueno eso es otra historia.

Este pueblo nos traerá siempre un grato recuerdo porque allí recibimos la llamada de un sobrino para comunicarnos que había aprobado el Bachillerato, y es que el día de antes se encontraba muy mal porque pensaba que repetía, sin embargo nos llevamos una alegría tremenda je je . Pero bueno volviendo a la visita en sí, no os perdáis la iglesia principal, dentro encontrareis una colección de datos muy interesantes en relación a los mosqueteros. Nos llamó la atención el contrato de matrimonio de Dartagnan. Sí si, contrato, lo sentimos por los romanticotes pero en Francia ya desde hace muchos años llamaban al matrimonio como lo que verdaderamente es, un contrato, un acuerdo de voluntades entre dos partes.

Otra cosa interesante que podéis visitar es la casas del mosquetero, se encuentra a las afueras del pueblo, hoy en día es de otro propietario y parece ser que está un poco hasta las narices de que los curiosos merodeemos por allí. Lo mejor para llegar es que preguntéis algún lugareño y os indicarán sin problemas. Por lo demás Lupiac no resulta de todo interesante.

BASSOUES:
Hoy estamos haciendo bastantes kilómetros y es que los pueblos y lugares que tenemos en la ruta porque nos parecieron más interesantes distan unos de otros algo más que el día anterior, pero no nos importa porque los paisajes en cada trayecto son únicos.

Llegamos a Bassoues a la hora de comer (sobre las 14horas). En el primer sitio que preguntamos nos dijeron que para comer ya nanai de la china. Así que nos dirigimos al centro del pueblo donde había un restaurante bastante agradable y con un menú muy completo y económico, lo encontraréis porque se encuentra a la derecha de un gran techado rustico que hace las veces de mercado en los días que se celebra. Tomamos un sopa o guiso y algo capón, nos invitaron a un Armagnan - lo cual nos extrañó- . También notamos como que nos miraban de vez en cuando los camareros, hasta que en una de estas nos preguntan si el chico alto que está con nosotros (Cristino) juega al baloncesto. Como de echo sí que juega la respuesta fue afirmativa, pero claro lo que preguntaban era sí era jugador profesional de baloncesto ja ja es que claro la conversación era en fracinglis así que....de hecho le entendimos como qué de que equipo era, la respuesta fue - pues del Real Madrid- ¿lo conocéis? A lo que los camareros contestaron rápidamente en sentido afirmativo. Finalmente entendimos el contexto de la conversación y les aclaramos que jugaba al baloncesto, que su equipo era el Real Madrid pero que ni era profesional ni nada je ja. Luego nos arrepentimos, si les hubiéramos dicho que era Mitotic posiblemente les habríamos sacado más licor je je.

Bueno estas simpáticas anécdotas siempre quedan en la memoria. Pero no debemos desviar la atención sobre el contenido de Bassoues -que lo tiene- Resultó ser un pueblo muy interesante. Tiene una Bastida del siglo XIII Torreón de 43. de altura que se puede visitar previo pago de 3€, además del antiguo mercado que hemos citado (del siglo XVI), alguna calle medieval y una iglesia que merece la pena. Todo además muy cerca.

MONTESQUIEU:
Dejamos atrás Bassques y nos dirigimos a Montesquie, previo arrancado de una mazorca de maíz de los extensos campos que íbamos dejando atrás. El pueblo es bastante grande, tiene una enorme plaza llena de comercios, es parte de la ruta del Camino de Santiago por lo que es habitual ver peregrinos.

Muy interesante la enorme iglesia del siglo XII de estilo románico, además queda en pie una de las puertas (eran dos) de la antigua ciudad, un buen lugar para admirar la belleza y si se tercia comprar algo o entrar en una boulangerie y apretarse otro bollo entre pecho y espada - que es lo que hacía Cristino en prácticamente todos los pueblos-.

Se trata de otro de los pueblos por los que pasa el Camino de Santiago, la llegada por la carretera es espectacular, tened cuidado porque os encontraréis un montón de peregrinos tanto en bici como andando a la entrada del pueblo. Por lo demás Marciac, destaca por su inmensa plaza llena de soportales, en la misma plaza se encuentra la oficina de turismo. También cuenta con un par de iglesias bastante interesantes. Marciac es famoso también por el jazz y es que en este pueblo existen muchos lugares y alternativas para disfrutar de la música. Cristino cómo no, asalto una boulangeri antes de irnos je je.
TILLAC:

Con la caída de la tarde llegamos a este encantador pueblecito. De dimensiones mínimas (se ve en media hora). Solo os diremos que si podéis no dejéis de visitarlo, tiene una arquitectura y calles muy bien conservada. Además quizás sería por la caída de la tarde pero el ambiente era muy relajante. Si viajáis en caravana os vendrá bien saber que había varias personas que estaban aparcadas en lugar muy tranquilo pensado para tal propósito.

A la entrada del pueblo hay un restaurante de cocina vasca que tenía muy buena pinta. La anécdota resulto ser unos tomates tamaño melón que encontramos en un huerto a punto de ponerse malos. Y aunque intenté coger uno para la cena, mis compañeros no me dejaron y tuve que desistir del intentó, ellos se lo pierden ja ja .

Por lo demás el día acabó con una parada inesperada para contemplar - y fotografiar - un atardecer impresionante. ¡ah! Qué lugar este Gers, que cercano y desconocido, cómo es posible que nos pase tan desapercibido. Está lleno de pueblos, paisajes, gastronomía económica etc etc......
Terminamos degustando otra cena bajo la luz de las estrellas.

Jueves 5 de septiembre de 2013, Mirandes, Mielan, Simone, Lombez, Samatan, Bouler.
Quinto día en el Gers y último. Así es, hoy terminaremos con esta magnífica región que dedicaremos íntegramente al sur y al este.
MIRANDES:

Otro pueblo de los más grandes de la región, lo que siempre hace que tenga un poco menos de encanto. Llegamos temprano, hay bastantes pequeños comercios por todos los lados, si necesitáis comprar algo éste también es un buen lugar. Por lo demás Mirandes sigue en la línea de la arquitectura de todo el Gers. Muy bonita la plaza central llena de soportales y casas antiguas. Había carteles por muchos sitios que hacían referencia al country, y es que por lo visto aquí hay un festival muy importante. No os perdáis la catedral, dicen que es toda un emblema del gótico (siglo XVI), la entrada es gratuita. Además la iglesia Sainte Marie.

Os llamará la atención la Torre de Rohan.
Antes de irnos compramos algún imán para la nevera (no abundan) y algo de pan para la cena.

MIELAN:
El segundo lugar que visitamos fue este pequeño pueblo que no tiene mucha historia la verdad, sí una plaza con soportales y las típicas casas con entramado de madera pero si no os pilla de paso podéis prescindir de él. Nosotros aprovechamos para comer un menú en el bar más asqueroso y sucio que hemos comido en mucho tiempo, buff la camarera que era muy amable no se debía haber lavado el pelo desde hacía varios meses. Y el local tenía una decoración mitad retro mitad pasado de moda junto con un aire poligonero de mucho cuidado. No quiero ni pensar si aparece por aquí chicote la que se lía.
SIMORRE:
Aunque se encontraba a bastante distancia de Mielan, la visita mereció la pena. Eso sí, llegamos con todo el calorazo y con el estómago lleno, es lo peor de viajar en verano, buff la zozobra de después de comer. Con respecto a Simorre deciros que tiene una iglesia que merece la pena visitarla (gratis), es del siglo XIV construida toda en ladrillo, es diferente al resto.

Y el resto del pueblo tiene muchas calles con gran encanto, tiendas típicas y alguna que otra plaza sorprendente, además cerca pasa un río que siempre da un refresco muy agradable. También compramos un poco de queso para la cena, práctica que es habitual en este viaje que en lugar de comprar para llevarnos (que también) lo que hacemos es comprar y comérnoslo.
LOMBEZ:

Resultó ser el primer pueblo que en un primer vistazo se ve algo diferente al resto de pueblecitos típicos del gers. Es grande, pero tiene una arquitectura muy interesante, la oficina de turismo tiene unas dimensiones importantes y allí nos informaron de las diferentes opciones que había por la zona (la verdad es que lo desconocíamos). Tiene una catedral del siglo XIV, gratis, también de ladrillo rosado pero mucho más impresionante que la de Simorre. También hay un mercado que está rodeado de casas verdaderamente singulares.

El lugar en general es muy interesante, perderse un poco por las calles céntricas, el entramado urbano tiene casi forma de semicírculo.

SAMATAN:
Cité del foie gras, acudimos por la recomendación de la oficina de turismo de Lombez y porque nos pillaba de paso. Está bien, os la recomendamos, desde el punto de vista turístico no hay mucho que contar, tiene un mercado de los más famosos de Francia.

Una iglesia poco interésate, lo que si vimos fue mucha vida, muchos comercios etc. Muestra de ellos los bollazos que nos merendamos y que saciaron nuestra sed de dulce. Es que los escaparates de las boulangerie son muy tentadores ja ja...
BOULAUR:

Último punto en retorno directo a nuestro alojamiento. Esto ya nos gusta mucho más. La Abadía de Boulaur es un priorato del orden de Fontevrault fundado en el siglo XII (fuente oficina turismo). El caso es que es un pueblo en lo alto de una colina, tranquilo y apacible y que se encuentra en plena rehabilitación con el claro ejemplo de atraer turistas. Lo están haciendo bien. Además si antes nos quejábamos del calor en verano a las cuatro de la tarde, ahora os decimos que el momento más mágico de cualquier viaje en verano es el atardecer cuando todavía hay luz y comienza a refrescar.

Así fue como terminó nuestro periplo por esta tierra tan interesante, regresamos hacia nuestra cabaña para disfrutar de la última cena mientras veíamos desaparecer por el retrovisor a Boulaur a la misma velocidad que se escondía el sol.

Adiós Gers, Adiós girasoles y maizales, Adiós a todas las variedades del pollo y la gallina que hemos comido, adiós al Armagnac y sobre todo adiós a este lugar lleno de paisajes, pequeñas carreteras que te llevan a tranquilos pueblos llenos de historia. ¿volveremos? Ojala pero eso ya se verá.
Viernes 6 de septiembre de 2013, Biarritz-San Sebastian.
Hoy dejamos atrás el sur de Francia. Realizamos nuestro último desayuno, recogemos y nos despedimos definitivamente con tristeza del Gers. ¿Nuestro destino? España, pero antes pasaremos a conocer Biarritz que está cerca de San Sebastian donde tenemos reservado una pensión para pasar la noche.
En unas horas llegamos a este típico pueblo de turismo del norte, con un aire absolutamente vacacional de clase media-alta.

Biarritz recuerda a lugares del norte de España como Santander o el propio San Sebastian. De ambiente muy agradable, relajado, sin el calor agobiante propio de éstas fechas.
Así que aparcamos y comenzamos dando un relajado paseo por la playa. Buena playa por cierto, llena de surfistas, pocos o casi ningún bañista ya que el tiempo y el cielo no acompañan pero si encontramos gente en la arena. Es lo malo del norte que el clima y la temperatura del agua no suelen acompañar. Pero tienen alicientes de sobra como para sopesar esto último.

Biarritz es más grande de lo que pensábamos, hay numerosos hoteles, restaurantes, bares, tiendas de moda etc. etc. Esta lleno de turistas de todos lados -como cabía esperar-.

Como decíamos dimos un largo paseo por la playa, es más, llevamos un pequeño picnic para no perder mucho tiempo y lo saboreamos mirando al mar. Nada más llegar habíamos tomado un plano en la oficina de turismo, Casi todos los Puntos destacables se encuentran cerca del mar.

Lo más interesante además de la playa; es el Casino (no entramos claro) el faro de Biarrizt el Palacete de Palaice. La iglesia Ortodoxa etc. Aunque lo mejor del lugar en realidad está por todos lados. Así es, son su entorno, su paisaje, el mar, y sus edificios, hasta 830 ostentan una especial protección, por lo que mejor es pasear prácticamente por cualquier sitio. La verdad, sería una opción muy buena poder quedarse unos días con más relax y disfrutar de las cosas mejor. Por cierto Biarritz no es barata así que para los que tengáis presupuestos ajustados estáis avisados.
Cerca de las seis de la tarde regresamos a nuestro coche y tomamos rumbo a San Sebastian que está apenas a unos kilómetros. Tenemos reservado un alojamiento a las afueras de la ciudad ya que está ciudad es también bastante cara. Dejamos las cosas en nuestra habitación, tomamos un taxi y nos marchamos al centro.

Allí fuimos directamente a la playa de la concha, el tiempo empeoraba por momentos, amenaza lluvia inminente ¡que mala suerte!. San Sebastian es una bella ciudad, con muchos alicientes interesantes, desde luego la arquitectura en sí es digna de alabar, todo el centro y entorno de la playa es de una belleza absoluta. También recuerda a una ciudad balneario del norte, de esas de gente adinerada.

Dimos un buen paseo por la playa, luego fuimos al casco antiguo y comenzamos a descubrí los famosos pinchos, ¡madre mía! No desmerece su fama, es absolutamente bestial, es cierto que te los cobran pero con dos o tres ya has cenado o comido.

Se nota mucho que aquí la cultura de salir de bares a comer y beber esta muy arraigada en la gente, dentro de cualquier bar se reunen gente joven, mayor, familias, todos se conocen y se saludan, se cuidan bien desde el luego je je.
En San Sebastián habíamos quedado a cenar con una prima de Carmen. -Ángela- y su marido que viven allí. Nos citaron en un restaurante del centro, el problema es que como se había puesto a llover llegamos ya con unos vinos y con unos pinchos encima. Buff pero en el restaurante más de lo mismo, comer comer comer y beber ja ja.. Terminamos literalmente reventados. ¡Como se come! Eso sí no vamos a engañaros, todo lo bien que comes lo pagas, no nos pareció nada ninguna ganga.

Tras una frugal cena, y tras ponernos al día, y después de una copa rápida, regresamos a la pensión un poco perjudicados. Ah por cierto, aquí los taxis se llaman por teléfono o te esperas en la parada (como si fuera un bus) no los llaméis a gritos o con la mano levantada o pensaran que estáis tarados.
A dormir fzzz fzzz
Sábado 7 de septiembre de 2013, San Sebastián-Madrid.
Cuesta despertarse tras un día como el de ayer, nos queda mucho viaje y queremos dar otra vuelta por los principales puntos de Doností. Esta vez nos acercamos en coche al centro, es sábado y el ambiente es muy bueno, la gente pasea muy arreglada y se dispone a tomar el aperitivo. En fin gastronomía aparte, como os hemos dicho está ciudad tiene una arquitectura muy interesante, playa, museos, montaña, teatros, cines, tiendas, etc ete. Tiene todo lo que una ciudad grande pero con un ambiente casi de pueblo. Terminamos la jornada -como no podía ser de otro modo- Tomando el último trago con el último pincho. Dejamos atrás Donosti que nos despidió con lluvia y tomamos rumbo definitivo a Madrid.
Reflexiones finales: Este viaje ha sido toda una sorpresa para nosotros, y decimos sorpresa en mayúsculas, nos ha llegado en un momento en que no disponíamos ni del tiempo ni del dinero suficiente para ir más lejos. Pero nos ha cambiado la perspectiva, si se dispone de más días, se puede plantear un viaje alucinante saliendo desde cualquier punto de España, visitando el País Vasco o Navarra o cualquier zona con acceso a Francia y después proseguir camino descubriendo una zona increíblemente interesante. Ya nos paso con la zona del Langedoc-Rosellon y ahora esto. Así que no sé que pensaréis pero nosotros en el futuro pensamos seguir descubriendo Francia - o Portugal- ya que existen cientos de zonas y rutas llenas de factores que pueden hacer de una escapada un gran viaje. Nos queda en la cabeza otras ideas como Burdeos y alrededores, Las Landas, Normandía, Bretaña, Loira, ¿seguimos? ..... hasta la próxima.