La masa social se mueve por impulso emocionales y por ignorancia. Es algo viejo como la civilización. Siempre habrá un enorme número de personas dispuestas a quedar en el más espantoso de los ridículos, a cometer las mayores atrocidades o a secundar los planes más disparatados de las élites. Y ni siquiera hace falta comprar a la mayoría de las gentes que conforman esa masa estúpida y fácilmente gobernable. Basta con tocarles el corazón, o el orgullo.
Apenas un día después de que la teledirigida marioneta Greta Thunberg diera su discurso en las Naciones Unidas, miles de manifestaciones han sucedido por todo el mundo protestando contra el cambio climático, el calentamiento global y ya que estaban con las pancartas en las manos, contra el capitalismo y cualquier otra cosa contraria al globalismo que intenta imponerse por todo el mundo.
En mi opinión, más que escribir sobre Santa Greta de Soros y lo sucedido en estos días, considero interesante rescatar este documental de hace unos años, censurado en no pocos canales de televisión, que fue uno de los que desenmascaró la gran estafa del calentamiento global. Una estafa que es tan solo una parte de la gran estrategia de manipulación y control de la población mundial.
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