Revista Opinión
Si esto no es humillar a las víctimas del terrorismo nacionalista, que quiten el delito del código penal. Un etarra ejerciendo de contertulio en la televisión dizque pública vasca que pagan los ciudadanos con sus impuestos. El tal Zubimendi. El de la cal viva. El que fue detenido mientras tomaba un café con ese psicópata apellidado Arizcuren Ruiz.
Sus primos lo escribieron hace tiempo. Y es lo que acabaremos cantando cuando seamos viejos frente al mar y hayamos perdido, también, la batalla del relato: "Irakatsitako historioa / hiltzaileek idatzi zuten / eta
ikasi genuena / oraindik sinisten dute"