de James Patterson.
Título: La hora de la arañaAutor: James PattersonEditorial: Duomo, 2017Páginas: 544.
Sinopsis.
Gary quiere sembrar el terror en la ciudad. Desea cometer el crimen del siglo. Alex, brillante detective y psicólogo que sabe entrar en la mente de los asesinos en serie, intentará detenerlo. ¿Lo logrará? La hora de la araña ya ha llegado.
Maggie Rose, la hija de una famosa actriz de Hollywood, ha sido secuestrada. También el hijo del secretario del Tesoro. La vida de ambos pende de un hilo y no hay tiempo que perder. Están en manos de Gary Sonejil, un asesino en serie que desea ser el centro de atención y que desde hace años tiene un objetivo: cometer el crimen del siglo.
Alex Cross es un sagaz detective de la Brigada de Homicidios y también psicólogo. Vive y trabaja en Washington. Es un tipo duro, que ha crecido en la calle y a quien le encanta su trabajo, pero, por encima de todo, adora a sus dos hijos. Hará todo lo posible para impedir los planes de Gary, aunque entrar en la mente de un psicópata no será su único reto. Escondido entre los hilos de la tela de la araña, le espera algo mucho más terrorífico, algo que acecha su vida y la de su familia.
Impresión personal.
Ésta es la segunda novela que leo de este personaje creado por James Patterson y ambas lecturas tienen mucho en común. Por un lado, la forma de escribir del autor, una manera clara y muy sencilla de exponer lo que va pasando, muy visual, tanto que son de ese tipo de novelas que son fácilmente trasladables a la gran pantalla y que seguro que dan mucho juego en la misma por su entramado y por los personajes que se identifican, especialmente su protagonista. James Patterson es muy claro y cercano y, sobre todo, muy entretenido y sin complicación alguna, con unos personajes agradables y sencillos hasta en el sufrimiento y unos malos muy malos, muy psicópatas, de esos que te ponen los pelos de punta y que te hacen desear durante toda la lectura que tu "héroe" tenga éxito. Por otro lado, las dos novelas forman, como dice el título de ésta, un entramado de casos y hechos aparentemente desconectados que al final se entrelazan como una tela de araña y lo que aparentemente no tiene importancia o se abandona, vuelve con posterioridad a cobrar la relevancia que requiere en el caso principal.
La novela comienza con un hecho aterrador, de esos que te hace preguntarte a ti misma ¿cómo puede haber tanta maldad en un "hombre"? Y eso siempre nos ocurre cuando los maltratados, los secuestrados, los asesinados son niños y mayor dolor y espanto mientras mas pequeños son los niños. Y algunos de los hechos que va relatando esta novela espantan, alarman y duelen porque son niños de muy corta edad los que sufren las maldades del protagonista principal, Gari Soneji, un psicópata con excesivos aires de grandeza y unas dotes especiales para la interpretación teatral a costa de ensayarlo durante toda su vida. Es tan bueno en esto que hasta te hace dudar de sus intenciones cuando está preso y de si está cuerdo o totalmente loco. Gari Soneji, el mal por el mal. Toda una vida dedicada a hacer el mayor daño posible, producir el mayor dolor a costa de los más débiles tan sólo para ser el hombre de peor calaña de la tierra y ganar un espacio en el mundo de la fama. En la otra parte, Alex Cross, todo un antihéroe con una vida normal, familiar, sentimental capaz de querer y amar y de ser amado por los suyos y con la necesidad de volver a amar porque lleva viudo ya más de tres años. Tiene dos hijos pequeños a los que adora y con quienes pasa ratos muy entrañables y una abuela, Nana Mama, que es quien lo ha criado, una sabia a la que da gusto escuchar, cabal y sentenciosa además de acertada. Policía de vocación a la vez que psicólogo criminal, comprometido con los de su raza porque, incluso en ciudades como Washington, se producen grandes desigualdades raciales de tal manera que ser negro y humilde marca la diferencia a la hora de que la policía se preocupe de la resolución de unos casos en contra de la desatención de otros si hay población de color afectada en la parte de las víctimas. Algo, por cierto, bastante habitual si estamos pendientes de las noticias de los telediarios en la actualidad. Resuta bastante agradable ir de la mano de Alex Cross a la hora de investigar un caso y eso que a veces diría que es un personaje excesivamente inocente.
En esta novela también destaca Jezzie Flanagan, de la policía secreta, una mujer blanca que se unirá a Alex Cross a la hora de investigar el caso ya que era la encargada de supervisar a las víctimas secuestradas por Gari Soneji. Una protagonista que junto a Alex protagonizará una historia de amor curiosa entre un hombre negro y una mujer blanca, algo nada asumido por la sociedad del momento.
La ambientación de toda la novela está bien definida de tal modo que podemos visualizar muy bien los diferentes barrios en que se mueven los personajes, los más pobres llenos de población de color y los que se refieren a la población blanca y pudiente, así como otra serie de escenarios más relacionados con la propia vida de Alex Cross como su domicilio, sus lugares de ocio, el comedor donde trabaja de voluntario, etc.
En resumen, una novela muy ágil y muy entretenida que se lee con rapidez por su preciso y claro lenguaje y la rapidez de los acontecimientos bien definida a través de capítulos muy cortos, lo cual le imprime un gran dinamismo a toda la novela.