Tabla comparativa de aditivos en la horchata
El problema principal de la horchata es que, una vez mezclada la chufa con el agua, aguanta mal el paso del tiempo. De entrada, es necesario añadir una sustancia emulsionante para lograr una mezcla estable entre el agua y el producto graso (chufa). Por eso casi ninguna marca se libra del E-471 (mono y diglicéridos de ácidos grasos), o del E-472c (ésteres cítricos de mono y diglicéridos de ácidos grasos).
Terra i Xufa, horchata
concentrada casi
sin aditivos
Este producto tiene dos defectos. De un lado, que su precio es muy elevado, aunque parece que HISC también fabrica otras horchatas concentradas como ésta, pero sin la certificación de producto ecológico. Aún así, son más caras que el resto de marcas de la tabla. El segundo defecto es su disponibilidad: sólo la he encontrado en el Club del Gourmet de El Corte Inglés, aunque también el fabricante la vende directamente desde su página en internet.
Una alternativa razonable es la horchata de Aldi, Milsani, que sólo contiene el antioxidante ácido ascórbico, E-300, y el emulsionante, E-472c. Del primero no hay que preocuparse ya que, en definitiva, es vitamina C, y del segundo la única advertencia es que no se puede descartar el uso de grasa animal en su elaboración (incluida la de cerdo), por lo que los vegetarianos estrictos, los musulmanes y los judíos suelen rechazan los productos que lo contienen.
Si no tienes cerca ningún Aldi, también puedes tomar la horchata de Carrefour y la de la clásica marca Chufi. Ambas contienen el ya mencionado E-471, que es casi idéntico al E-472c, con el mismo problema del tipo de grasa utilizado. La marca Costa también añade dos aditivos inocuos, E-331 (citratos de sodio) y E-460 (celulosa), además del E-466, carboximetilcelulosa. Éste último aparece en amarillo porque, según la 'Guía completa de aditivos alimentarios' de los periodistas Manuel Núñez y Claudina Navarro, "en la carboximetilcelulosa puede haber restos de dioxinas cancerígenas". No he encontrado ninguna otra referencia sobre este riesgo, pero por si acaso lo etiqueto como amarillo.
Horchata Milsani, con
solo dos aditivos
La versión light de Chufi (sin azúcar), lógicamente añade edulcorantes en sustitución del azúcar. Concretamente, E-950 acesulfamo K (K porque es una sal de potasio) y E-955 sucralosa. Del primero no existen evidencias de efectos adversos, pero está en amarillo porque hay expertos que advierten que sería necesario realizar más estudios, ya que los actuales están en su mayoría financiados por la propia industria y, como sabemos, no van a sufragar ninguna investigación que pueda arrojar resultados que perjudiquen su negocio. Con respecto a la sucralosa, estudios en ratas evidenciaron efectos negativos sobre la flora intestinal, aunque estudios posteriores descartaron dichos efectos en humanos dentro de los niveles de consumo aconsejados. Como existen otros edulcorantes que no cuentan con problemas, ni siquiera en las ratas, creo conveniente evitar el consumo del E-955 siempre que sea posible.
Finalmente, quiero destacar que la variedad Maestro Horchatero de Chufi, un producto que se supone de más calidad y, por tanto, más caro, no solo añade carragenanos, sino que también incorpora fosfatos, E-451. que pueden alterar el equilibrio calcio/fósforo de nuestro organismo. Además, un estudio dirigido por el Dr. Eberhard Ritz, del centro de nefrología de Heidelberg (Alemania), advierte del riesgo para la salud que supone su consumo.
Así que, sinceramente, dudo yo que un maestro horchatero de verdad le añada tantos aditivos a la horchata tradicional. Así que, menos cuento y, de paso, menos aditivos. Por favor.