Revista Viajes

La Hoz de Beteta en el Parque Natural de la serranía de Cuenca. Un edén de tilos, roca caliza y agua

Por Kukiatletico

La Serranía de Cuenca es sin duda uno de los parajes naturales más espectaculares que podemos disfrutar en la zona centro de la península ibérica. Entre todos los tesoros que alberga este Parque Natural, la Hoz de Beteta por supuesto es uno de esos lugares inolvidables que rebosa naturaleza por todos sus rincones. Todo el entorno de la serranía de Cuenca se encuentra dominado por grandes roquedos y paredes verticales de roca caliza que se entremezclan con extensas zonas de pinar atravesadas a su vez por espectaculares cursos de ríos de aguas de gran pureza de colores turquesa y esmeralda.

Bajo la denominación de Monumento Natural hoz de Beteta y sumidero de mata asnos encontramos un paisaje espectacular que aúna diferentes singularidades que lo hacen único. El río Guadiela, gran protagonista de este paisaje, durante 6 km a su paso entre las localidades de Beteta y Puente de Vadillos ha moldeado un espectacular cañón durante millones de años creando además un microclima atlántico poco común en la zona central de la península ibérica. En cuanto a su riqueza geológica, destacan las grandes paredes verticales que acompañan el curso del río. Además, este enclave presenta una serie de formaciones geológicas que lo hacen todavía más singular, cascadas tobáceas, cuevas y travertinos acompañan al rio Guadiela en su recorrido por esta maravillosa hoz encajonada en un espectacular barranco; se trata de un tesoro geológico y natural único concentrado en una pequeña extensión de terreno.

Otro de los mayores atractivos de esta ruta son los monumentales pies de tilos que nos acompañarán durante todo el sendero, este árbol poco común en la península ibérica, mejor adaptado a zonas de climas más fríos, destaca por su longevidad (hasta 900 años) y sus asombrosas raíces emergentes que se agarran a las rocas, creando un paisaje de cuento de hadas. Además, avellanos, fresnos y álamos temblones se dispersas por las inmediaciones de toda la hoz de Beteta. La profundidad de la hoz es donde se han mantenido las condiciones más frías y húmedas, por lo que ha sido el lugar elegido por estas especies típicas del bosque eurosiberiano para establecerse. En cuanto comienza a subir la altitud, estas especies comienzan a dar paso al pino negral que coloniza las laderas de menor inclinación. En las zonas bajas de la propia hoz, se dá un ecosistema muy peculiar y singular conocido como pajonal que está formado por zonas encharcadas en las que predominan diferentes especies de gramíneas entre las que destaca la Molinia formando prados densos y altos acompañados de otras especies como el junco, la valeriana o el lirio. Las olas gigantes de roca caliza que nos rodearán en algunos tramos son otro ejemplo de formación geológica espectacular; las rocas carbonatadas, más blandas, han sufrido mucho más la erosión que la calcita y la arcilla, mucho más resistentes al agua, creando unas ondulaciones en estos grandes farallones haciendo todavía más espectacular este paisaje. En estas formaciones, destaca la presencia de diferentes tipos de plantas rupícolas como la Pinguicola mundi, especie de planta carnívora endémica de la península ibérica.

El sumidero de mata asnos es la otra formación geológica principal que compone este paisaje, se trata de un arroyo que desaparece para continuar su curso durante un buen tramo de forma subterránea a través de galerías y cuevas para de repente volver a asomar y verter todas sus aguas al rio Guadiela, sin duda alguna un espectáculo más que nos ofrece la serranía de cuenca.

Este paraíso resulta el hábitat ideal para uno de nuestros mamíferos fluviales más emblemáticos como es nuestra querida nutria, la riqueza y escasa contaminación de las aguas del Guadiela han creado un ecosistema perfecto para este simpático animal. Las cuevas de La ramera y de Armenteros son un perfecto hábitat para dos de las especies de murciélago más presentes en nuestra fauna ibérica como son el ratón y el de herradura, Además, las grandes moles de roca caliza que emergen durante toda la hoz de Beteta son un lugar idóneo para la nidificación del buitre leonado. La hoz de Beteta también estaca por albergar dos de las especies de caracoles más comunes de nuestra fauna (Cepae hortensis y Euomphalia), siendo las poblaciones más al sur de estas especies.

La mejor forma de recorrer la hoz de Beteta es desde el aparcamiento del Área recreativa de la casa de la pradera, donde llegaremos a través de la carretera CM-210 que une las poblaciones de Puente Vadillos y Beteta. El conocido como paseo botánico es un sendero que acompaña aguas abajo el curso del río Guadiela. Durante aproximadamente 3 km disfrutaremos de un verdadero bosque Eurosiberiano hasta llegar a la fuente y la presa de los tilos. A partir de este punto comienza el paseo temático, seguiremos por el mismo camino hasta encontrar la cueva de la Ramera. Más adelante llega el tramo más intenso y exigente de la ruta propuesta, la subida a la cueva y el mirador de Armenteros es un tramo de unos 3 km de longitud, con un gran desnivel acumulado, sobretodo en la parte final que se aleja del río, pero que merecerá la pena si queremos tener una panorámica espectacular desde uno de los puntos más altos de la Hoz de Beteta.

La Hoz de Beteta en el Parque Natural de la serranía de Cuenca. Un edén de tilos, roca caliza y agua

La Hoz de Beteta en el Parque Natural de la serranía de Cuenca. Un edén de tilos, roca caliza y agua

La Hoz de Beteta en el Parque Natural de la serranía de Cuenca. Un edén de tilos, roca caliza y agua

La Hoz de Beteta en el Parque Natural de la serranía de Cuenca. Un edén de tilos, roca caliza y agua

Texto y fotos- Jose Angel Macho Barragués. Ingeniero Agrónomo.


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