El 70% de los alemanes considera que España es un país pobre; el 3,1%, que somos tradicionales y el 61,9% que España es un país religioso a pesar de ser considerarnos un estado aconfesional. Los franceses nos ven débiles –un 76% nos ven como pobres, débiles y muy religiosos–, los ingleses como más campestres que urbanos y los marroquíes, como intolerantes. Son los resultados del último 'barómetro de la imagen de España', realizado por el Real Instituto Elcano con muestras de diez países entre los que se encuentran Alemania, Reino Unido, Francia, Estados Unidos y el vecino Marruecos.
Pese a que no se preguntó a los entrevistados por los motivos de sus valoraciones, los resultados, según Carmen González Enríquez, directora del Observatorio sobre la Imagen de España e investigadora principal de Elcano, se deben a la percepción que se tiene en Alemania, por las informaciones publicadas en sus medios de comunicación, de que España,a diferencia de países como Grecia, “ha hecho los deberes” para intentar superar la crisis económica, algo que explicaría la buena valoración general que nos da el país.Marruecos es el país que da una puntuación más baja a España, frente a los casos contrarios de México y Brasil, donde nuestro país sale mucho mejor parado. En concreto, el 37% de sus ciudadanos califica a los españoles de “intolerantes” a pesar de que, en general, la tolerancia es un calificativo que nos suelen dar los países que participan en el barómetro. La baja nota de nuestros vecinos marroquíes, según Elcano,está relacionada con “su tendencia a valorar por debajo de la media a la mayoría de los países” pero también, a las malas experiencias de la inmigración marroquí en España y a “las dificultades que experimenta para abrir mezquitas en barrios y pueblos”. Sin embargo, Marruecos es el país que, en mayor medida, considera muy importante mantener buenas relaciones con España, por encima de Inglaterra, Estados Unidos oCorea del Sur.
El informe deja muy difuminada y en segundo plano la imagen de la España decharanga y pandereta en la que los toros, las fiestas y la siesta son los protagonistas. En cambio, la crisis comienza a aparecer como elemento característico. En cambio, el barómetro sitúa el atractivo turístico como el aspecto mejor valorado del país, mejorando de manera considerable la imagen que tienen de España las personas que sí nos han visitado. También los deportistas y ciudadanos españoles tienen una valoración positiva, a diferencia del aspecto económico, que se encuentra en el extremo contrario. Además, los resultados del estudio muestran que España se ve en general como un paíshonesto y trabajador.