La importancia de incluir en nuestra dieta fibra.

La fibra es uno de los elementos nutricionales de la dieta que no debería faltar.

Pero qué es la fibra exactamente?

La fibra es la parte de los alimentos que no digerimos pero que cumple con funciones importantísimas en nuestro cuerpo. La más importante de estas funciones es que aumenta el tránsito intestinal y el volumen de las heces haciendo que sea más fácil para el organismo eliminar desechos y evacuar con mucha más rapidez.

La consumición de fibra así se ha convertido en un tema ideal de controversia, introduciéndose en múltiples alimentos como los copos de cereales, las galletas, la leche, los panes de molde así como las pastas o las barras de pan tradicionales. Según los últimos estudios realizados por las principales Organizaciones Mundiales de la Salud, la fibra ayuda a combatir ciertos padecimientos, los cuales tienen que ver con ciertas enfermedades crónicas del colon, como el cáncer de colon o el síntoma del colon irritable.

Aunque abusar de la fibra puede acarrear diversos problemas digestivos como las malas digestiones, una excesiva fermentación en la digestión y en la substracción de los nutrientes así como acidez de estómago e irritabilidad. Así mismo incluir la fibra en la dieta ayudará a desechar todas las grasas sobrantes, las cuales se acumulan en el organismo, mediante la sobre alimentación o la absorción exagerada de las mismas en el intestino.

Te preguntarás además, que tipos de fibras podrás consumir. Existen dos tipos de fibras: la soluble y la insoluble. La fibra soluble es favorable para el crecimiento y repoblación de la flora intestinal y para el desarrollo de las células instestinales, y la encontraremos en legumbres, frutas y verduras. La fibra insoluble es aquella fibra que no se disuelve en agua aunque tenga la capacidad de absorberla. Encontraremos fibra insoluble en : cereales integrales, piña, patatas, arroz, legumbres, o avena.