La importancia de la prueba de maquillaje para la novia

Muchas novias se preocupan mucho de encontrar su peinado ideal para la boda, pero olvidan que también el elegir el maquillaje es algo muy personal. ¿Por qué? Porque tienes que sentirte tú, con un maquillaje que realce lo mejor de tí, pero que no te deje “disfrazada” de algo que no eres. Durante muchos años la tendencia impuesta era un maquillaje muy suave, de labios claros, sombras pastel… eso está muy bien si encaja con tu estilo, pero ¿por qué no ojos ahumados, o labios rojos, o sombras de colores?

Lo primero a tener en cuenta es, precisamente, tus preferencias personales. Parece muy obvio pero muchas veces no lo es tanto. Olvida lo que hacen otras novias, lo que quiere tu madre o lo que tu suegra piensa que es lo apropiado. Tienes que elegir tú qué maquillaje quieres para tu gran día.

Después tienes que dar con el profesional que lo llevará a cabo. Recuerda que los maquilladores profesionales te sabrán aconsejar, pero nunca impondrán su criterio sobre lo que tú hayas elegido. Un profesional sabrá sacar lo mejor de tí y hacerte brillar ese día, eso tenlo por  seguro. Dejarte aconsejar por ellos es lo ideal, pero antes de ponerte en sus manos estaría muy bien que te pusieras manos a la obra y realizaras ‘trabajo de campo’. Coge inspiración de aquí y allá: revistas (no sólo de novias, de moda en general, ¡incluso de cotilleos!), busca a novias reales con el estilo que será tu boda, deja que San Google te sirva de inspiración… cualquier cosa vale con tal de que consigas reunir imágenes de maquillajes que te gustan para poder discutirlas con tu maquillador.

Es también muy recomendable que te pongas a recopliar ideas una vez que ya hayas encontrado tu vestido. El vestido definirá tu estilo y hará que te decantes por una línea u otra, así como el resto de factores que influyen en la boda como el entorno, los colores que hayáis elegido, la época del año en la que os casáis, la luz que vaya a haber… ¡Todo cuenta!

Si es posible, es una gran idea que puedas realizar las pruebas de maquillaje el mismo día que tienes alguna prueba de vestido, así puedes ver el efecto completo y estarás a tiempo de cambiar algo en caso de que no te convenza.

Desde luego, la prueba de maquillaje es una parte del presupuesto que merece la pena invertir.

Y tú, ¿ya has decidido cómo será tu maquillaje el día B?

(Imagen, vista aquí)