
Las cosas, los hechos son sólo la parte manifiesta de todo lo que no puede ser, una diminuta incursión de lo imposible en los dominios de lo experimentable, el punto en el que quedaron interrumpidos los intentos de ir a alguna parte.

Las cosas, los hechos son sólo la parte manifiesta de todo lo que no puede ser, una diminuta incursión de lo imposible en los dominios de lo experimentable, el punto en el que quedaron interrumpidos los intentos de ir a alguna parte.