España, a comienzos de los años 80. Dos policías, ideológicamente opuestos, son enviados desde Madrid a un remoto pueblo del sur, situado en las marismas del Guadalquivir, para investigar la desaparición de dos chicas adolescentes. En una comunidad anclada en el pasado, tendrán que enfrentarse no sólo a un cruel asesino, sino también a sus propios fantasmas.
Reconozco que tanto elogio me abruma. Nunca sé que me voy a encontrar ante una película aplaudida por crítica, público y multi-premiada. Es difícil mantenerse al margen, con la mínima información previa, cuando se ha hablado tanto de ella.
Me encanta el cine negro. He seguido a este director, y también me gusta su trabajo previo. Al principio me costó un poco meterme en la historia. Ambientación y parajes, soberbios, con una fotografía impecable. Sensaciones asfixiantes y una tensión constante que por momentos se eleva. La intriga y el ritmo del guión son realmente buenos. La banda sonora, sigilosa, y soberbia. Los actores protagonistas, excelentes. Técnicamente de un nivel superior.
A destacar el trasfondo que oprime. Las condiciones de vida de la gente de un pueblo que sobrevive entre cosechas trapicheando con tabaco o drogas. Los poderosos que protegen a los mafiosos. El pasado que pesa. Y sobre todo, esas chicas que son brutalmente asesinadas. Esas casas abandonadas….
Y a pesar de todo esto, no me ha impresionado tanto como era de esperar.
Director Alberto Rodríguez. Guión Alberto Rodríguez y Rafael Cobos. Música Julio de la Rosa. Fotografía Alex Catalán. RepartoRaúl Arévalo, Javier Gutiérrez, Nerea Barros, Antonio de la Torre, Jesús Castro,Mercedes León, Manolo Solo, Jesús Carroza, Cecilia Villanueva, Salvador Reina,Juan Carlos Villanueva. España 2014, 105 min. Premios: 10 Goya: incluyendo Mejor película, director y actor. Festival de San Sebastián: Mejor actor (Gutiérrez) y fotografía.