La isla volcánica de Aogashima

Un lugar paradisíaco en el Mar de Filipinas y perteneciente a Japón es una de las bellezas orientales por descubrir

JAPÓN.-Aogashima es una pequeña isla, tropical volcánica en el Mar de Filipinas, bajo el gobierno de Tokio a pesar de estar situada a unos 358 kilómetros de distancia de la capital del país. Es la isla más meridional y la más aislada habitada del archipiélago de Izu. La isla en sí es un cráter volcánico gigante, y dentro de ese cráter hay otro volcán, más pequeño.

Aogashima todavía se considera un activo de clase C, si bien, el volcán erupcionó por última vez en la década de 1780. La última vez que hizo erupción mató a casi la mitad de la población de la isla y obligó a los habitantes restantes a huir. Le tomó sólo cincuenta años para que la gente regresase. En la actualidad, unos 200 pobladores valientes viven en la isla. Aogashima es un volcán submarino que ha surgido del mar y forma parte de un gran cráter cuyo borde exterior va de 200 m hasta 420 m de altura. Se cree que la isla fue formada por los restos de superposición de por lo menos cuatro calderas submarinas. La costa sur se eleva a un canto agudo formando un borde de una caldera denominada Ikenosawa con un diámetro de 1,5 km. La caldera está ocupada por un cono secundario denominado Maruyama, que todavía está emitiendo vapor geotérmico. Otonbu, el pico del borde del cráter exterior a una altura de 432 metros sobre el nivel del mar, es el punto más alto de la isla. Se tiene una vista panorámica desde el volcán de todo el Océano Pacífico.

La isla es apenas accesible excepto en barco. La isla no tiene un puerto real para anclar embarcaciones debido a los acantilados escarpados de capas de depósitos volcánicos que rodean toda la isla. La otra opción es tomar un helicóptero proporcionado por el servicio de traslado de Tokio Island. Ambos parten de Hachijojima, la isla más cercana a unos 60 kilómetros de distancia. Antes de que el servicio de helicóptero fuese lanzado en 1993, el transporte de pasajeros, mercancías y productos alimenticios esenciales se hacía únicamente en barco, de modo que la gente no sabía cuándo llegaría.

El helicóptero tiene una frecuencia de una vez al día y sólo lleva un máximo de 9 pasajeros. Muchas veces se cancela debido a la densa niebla, dependiendo de la temporada. Esta es la razón por la que Aogashima sigue siendo una isla rara vez visitada.

No hay mucho que hacer en Aogashima, a excepción de disfrutar de la tranquilidad de un paraíso tropical. En el centro de la isla se encuentra una sauna geotérmica. Hay un centro público que el poder geotérmico y el gas y la gente lo usa para cocinar. Esta cocina con vapor geotérmico está disponible de forma gratuita. Las verduras frescas, las patatas o los huevos al vapor son una de las especialidades de Aogashima. La instalación también cuenta con una sauna, un baño público, y duchas calientes.
Aogashima es el pueblo más pequeño de Japón. En 2009 la población de la isla era de 205 y está disminuyendo. La isla cuenta con una escuela primaria con unos 25 alumnos. Cuando llegan a la edad de quince años, tienen que ir a la escuela secundaria en el continente y no se sabe si van a volver a Aogashima. Las canciones folclóricas que aquí la gente canta en su mayoría son historias de salir de la isla y separarse de sus seres queridos.