“Esto no es populismo, esto es justicia social”, Nicolás Maduro Moros
Ayer tomé la decisión de encender la televisión y sintonizar una cadena que transmitía en ese momento el Pdte. Nicolás Maduro. El contexto era el siguiente: Maduro en un escritorio, decretando, a diestra y siniestra, un sinfín de bonos mensuales para los hogares donde el grupo familiar cuenta con el “famoso carnet de la patria”, lo cual llamaba bono hogar. Como público contaba solamente con mujeres o “mujeres de la patria”, y hacía mención de un bono decretado días anteriores, donde pagaría a la mujer por estar embarazada ¿una locura, no? Pero este tema del bono embarazada, lo abordaré después.
Entre gritos de “así, así, así es que se gobierna” y “¡Viva Maduro!”, y no sé si por casualidad o destino, dicho personaje hizo uso de una frase que resonó y resonó por horas en mi cabeza, la cual cito textualmente: “esto no es populismo, es justicia social”. ¿Justicia social? -pensé yo- , esto debe ser un concepto distorsionado de “justicia”, así que consultando a un amigo de confianza y entendido en el tema, me recomendó un vídeo del Prof. Jesús Huerta de Soto, Catedrático de Economía Política en la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid, titulado La “justicia social” es injusta. Y “¡joder tío, que video tan bueno!”. Les dejaré el link, porque todos debemos analizar y fijar una posición con respecto al término “justicia social”, pero antes quiero compartirles mi análisis.
Cuando se habla de justicia, es importante entender que es un concepto que debe aplicarse de manera objetiva, de ahí que se represente a la justicia como una mujer con los ojos vendados. La justicia también es referencial, porque para definir si una acción es justa o injusta, esta debe encontrarse bajo ciertos criterios, los cuales llamaremos leyes. Las leyes tienen como característica general, el ser aplicable para todos por igual, sin tener en cuenta alguna circunstancia particular. Es decir, se contempla en la ley el asesinato como un delito, y por lo tanto, una persona que cometa asesinato debe ser juzgada sin miramiento alguno como un asesino, y cumplir, según lo que dicte la ley, una penalización o castigo sin importar estatus social, religioso, etc. Ahora, ¿por qué la justicia social es injusta? ¿Qué es la justicia social? ¿Cómo nace?
El Prof. Huerta de Soto explica que la justicia social nace en el sistema de mandato (legislación específica, de contenido concreto, que ordena hacer cosas determinadas, en circunstancias particulares), donde el concepto de justicia es radicalmente distinto, es corrupto, ya no es el cumplimiento de la Ley en el sentido material, ni tampoco es ciega. La justicia social es la impresión más o menos emotiva, que produce en el juzgador el resultado del proceso social, en un momento concreto, y en relación con los fines del que manda. No es ciega, es arbitraria, justifica injusticias en sentido material y genera inseguridad jurídica. Por ejemplo, si en un salón hay muchos pobres y pocos ricos, se dice “que hay injusticia social” y que deben quitarle al rico para darle al más necesitado.
El concepto de justicia social distorsiona la justicia al punto de que el ser juzgado, no depende de la ley, sino de la impresión en términos de emotividad que causes en el juzgador. Si lo traducimos a las políticas actuales que el gobierno de Venezuela está implementando, entonces vemos como justifican el agasajo de dinero mensual a causa “de la guerra económica, el imperio, la derecha” o que se yo, promoviendo un pueblo que se acostumbra a que le den y no a ganarse el dinero para subsistir. Justificando la desidia y el conformismo, y promoviendo el odio al rico. Cuando la inflación no es culpa del bachaquero o de Lorenzo Mendoza, es del estado. Cuando está crisis no es culpa de Trump o del Imperio, es del Estado.
Sin embargo, creo que está en cada uno digerir este concepto y forjar una opinión propia, y para ello les dejo el link del vídeo.
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