El empate sin goles del derbi capitalino y el la igualada a dos goles de la Juventus, que perdió dos puntos en el minuto 94 en el campo del Verona, mantiene al equipo de Turín con nueve puntos de renta sobre la Roma, tras la vigésima tercera jornada de la Serie A italiana de fútbol que concluye hoy con el Inter-Sassuolo.El derbi romano contó con un importante dispositivo de seguridad para evitar posibles altercados entre los aficionados de ambos conjuntos rivales, tal y como sucedió ayer a las puertas del San Paolo napolitano.
Antes del saque de inicio, los aficionados presentes en el estadio Olímpico de la capital rindieron homenaje con un largo aplauso a Clara Insidioso, una joven romana agredida ayer por su marido y que permanece en coma, a la que dedicaron una pancarta en la que pudo leerse "¡Vamos Clara, no te rindas!". La grada norte de estadio mostró un gran mosaico de bandas blancas y celestes mientras que la sur, ocupada por los "tiffosi" del Roma, respondieron a sus contrincantes con antorchas de color amarillo y rojo y una decena de cohetes.Pese a la energía que desprendía el Olímpico al comienzo, el encuentro derivó en una pugna entre dos fuerzas similares que no consiguieron imponerse la una a la otra, a pesar de que el Roma hizo un mejor primer tiempo. Un Roma a priori superior que no superó a un Lazio que llegó a este choque revitalizado después del cambio de entrenador. Edy Reja, ha devuelto la confianza y buen juego al equipo, como ya se pudo apreciar al frenar al Juventus (2-2) y sumar dos victorias.
Pero el empate no fue todo lo dramático que podría haber sido para el Roma de Rudi García, ya que el Juventus también se vio frenado con unas tablas inesperadas a causa de una carambola en el minuto 94 del argentino Juan Ignacio Gómez que acabó con la ventaja que los turineses habían mantenido todo el encuentro, después de que Carlos Tévez asegurase una cómoda ventaja con sus goles en los minutos 4 y 21.
El veterano Luca Toni redujo la desventaja local al comienzo del segundo tiempo (m.52), al rematar de cabeza una falta lanzada por el brasileño Romulo, que también dio un pase decisivo a Juan Gómez, en el último minuto, que el argentino convirtió en el empate.