Como ya he comentado en diversas ocasiones, una de las consecuencias de vivir en casas es que las ciudades tienen una extensión muchisimo mayor de lo que tendría si fuesen pisos como en España. Esto conlleva que al ayuntamiento le salga por un pico el podernos dar ciertos servicios a los ciudadanos, como por ejemplo la recogida de basuras o la limpieza de las calles. Ante ello es económicamente imposible el contratar ejércitos de barrenderos para estar peinando toda la ciudad y se limitan a los parques y avenidas principales.
Por ello una de las ordenanzas municipales es que cada vecino es responsable de barrer la parte de calle que está justo frente a su casa o, como se suele decir, barrer la banqueta (acera).
El problema inicia cuando no todos los días puedes barrer la calle por que tienes que andar currando de 6 de la mañana a 10 de la noche. Aunque puede ser que a veces en la misma calle veas como la basura se acumula en un lado de la calle por cuestiones de como el viento sopla en un o u otro sentido (este es mi caso, y ¡Adivina que!. Si, yo vivo del lado donde se junta la mierda, ver imagen). O que apenas acabes de barrer y una ráfaga de viento venga y te lance media tonelada de hojas a la puerta.
Esto muchas veces causa problemas entre los vecinos, porque empiezan las marujas a quejarse de que si la vecina de la izquierda es una marrana porque nunca barre, que la de la derecha barre todos los días pero le echa la basura a su pedazo de acera, o que la de enfrente echa mucha agua y se viene toda para mi cacho de calle, han habido muchos casos que hasta a escobazos han terminado (y hablo literelmente).
También está el problema de toda la mierda que la gente tira a la calle sin piedad, o los solovinos que se cagan a la puerta tu casa. Ante ello es menester el tener dos escobas, una para barrer la calle y otra para barrer adentro de casa, o por lo menos así es en mi caso, porque la verdad a mi me da un asco del copón el recoger una cagada de perro y pasar esa misma escoba por debajo mi cama.
Lo curioso es que como los alrededores de la ciudad (y la propia ciudad) son bastante secos, hay mucha tierra en las calles, y cuando estás barriendo la calle se puede formar una polvareda a tu alrededor de tres pares de narices. Por ello mucha gente suele echar agua para barrer la calle y evitar que esta tierra se levante. A mi la verdad me resulta bastante incomodo pues siento como que la escoba pesa mas, que la mierda se pega mas al suelo y para arrastrarla tienes que hacer el doble de esfuerzo, así que prefiero usar un tapabocas para barrer afuera y no fumarme la mezcla explosiva entre restos de hojas y botellas de cocacola junto a mierda de perros, plumas de pájaros o incluso algún bichejo raro con forma de ratón aplastado por un coche. Lógicamente de terminar de barrer la calle pasas a la bañera directo y sin escalas.
Otra curiosidad al igual que las fregonas es la preferencia de la gente de unas escobas hechas a base de pajas... no joer, no seas mal pensao, hablo de que están hechas de un material biodegradable, son escobas similares a las que usan las brujas de las películas. Esas escobas son un poco mas resistentes y vienen bien para barrer fuera, pero la verdad a mi me resultan bastante incomodas y prefiero utilizar la típica escoba con forma de cepillo, desde mi punto de vista mas manejable, y lo mejor de todo, mas barata (ya ha salido lo tacaño a relucir).
Cerca de Monterrey hay una pequeña ciudad donde se fabrican estas escobas, y por lo visto deben tener bastante éxito pues no solo se comercializan en el mercado local, sino que hay importantes niveles de exportación de escobas hacia el norte del río Bravo.
LOS COMENTARIOS (1)
publicado el 18 agosto a las 11:23
Criatura es que tú, según la foto, barres la calle con un cepillo y eso se lleva puesta toda la porquería. Se barre con un escobón de varas como los que dices, que después se sacuden fuerte con agua y ya se quedan limpios. Por supuesto que para tu casa es mucho mejor el cepillo.
He llegado a tu página buscando la foto de una escoba tradicional, para enseñársela a uno que está barriendo un piso de arena con un cepillo como el tuyo y claro, va listo el pobre.
Suerte y recuerdos gaditanos.