La división es tal que destacados profesionales que cobran en CUP tienen un poder adquisitivo mucho menor que aquellos que hacen negocios en CUC. Por ejemplo, una funcionaria y profesora universitaria como Marieta Díaz Espinosa, a pesar de su título como Máster en Ciencias Pedagógicas solo cobra unos 850 CUP y tiene que ahorrar cada mes para ver si le alcanza su salario.
“La reunificación monetaria me vendría bien, quizás así mejoren un poco las cosas y los salarios sean de verdad en correspondencia con el trabajo de cada cual. Seguro que los primeros meses esto va a ser un caos, pero después se debe tranquilizar todo y ojalá que se resuelvan así muchos problemas de la economía nacional, y de nosotros los trabajadores estatales”, manifiesta Marieta.
“He visto algunas noticias sobre eso, pero hasta ahora lo único que he visto en la práctica es que en las Tiendas Recaudadoras de Divisas ya se puede pagar con cualquiera de las dos, y antes solo era en CUC. Espero que ese proceso sea rápido porque realmente en Cuba eso afecta a todo el mundo, pero sobre todo a los trabajadores estatales, profesionales y hasta científicos e investigadores”, declara esta profesora con más de 30 años de labor.
Varias monedas hace más de un siglo
La historia de varios tipos de monedas circulando en el país no es nueva: en los años de la Primera Ocupación Norteamericana, entre 1899 y 1902, circulaban tres monedas en Cuba: el dólar estadounidense, que ya entraba en la economía cubana; las pesetas españolas, que se cotizaban muy bien, y hasta monedas francesas de oro, de más alta cotización.
Durante el establecimiento de la República de 1902 se instauró el Peso Cubano como moneda oficial, pero siguió circulando el dólar americano ya que la economía cubana estaba supeditada a la norteamericana. Aunque dentro del país tenían un valor nominal similar, las operaciones internacionales se hacían en dólares y muchas personas escogían hacer sus cuentas en los bancos en la moneda extranjera, que tenía un respaldo mayor.
A partir de 1959, con el triunfo de la Revolución Cubana, la fuga de capital de los bancos cubanos hacia el exterior dejó casi limpias las arcas cubanas, que perdieron así un respaldo económico importante en divisas internacionales.
Durante la década del 60 del pasado siglo se bloqueó la moneda norteamericana en la Isla y Cuba decidió de todos modos mantener la equivalencia del dólar y el peso cubano para los cálculos de su economía a nivel macroeconómico.
Pero los cubanos de hoy poco o nada conocen de esta historia, para ellos solo importa tener dinero en el bolsillo, y poner comprar bienes y servicios con ellos, por supuesto, con una moneda que valgan algo.
Arsenio Pérez es uno de esos cubanos que anda preocupado por la eliminación de la dualidad monetaria. Sus estudios de nivel superior de Contabilidad y Finanzas le dan una perspectiva diferente del proceso.
“La reunificación monetaria influirá en muchas cosas, desde los sistemas contables de las empresas hasta los pequeños negocios particulares; yo por ejemplo compro todo en CUC y vendo todo en CUC, ahora tendré que cambiar todas las tarifas y esperar a que los compradores se acostumbren rápido a tener que pagar por todo con una sola moneda. Por ejemplo, si antes me compraban una computadora en 700 CUC, ahora cuando se termine el proceso me tendrán que pagar 17 500 CUP, que son una tonga de billetes que valen muy poco”, nos comenta Arsenio.
Para cubanos como este, que se desempeña como empresario autónomo, el cambio puede traer pérdidas, pues su “salario” es variable según las ventas y ahora pocos cubanos quieren hacer pequeñas inversiones, como computadoras y equipos electrodomésticos.
Recirculación de las monedas en los 90s
La despenalización del dólar en 1993 logró que se fuera reduciendo circulación clandestina y la puesta en circulación a partir de 1994 del Peso Cubano Convertible (CUC) hizo que la economía de los cubanos comenzara a girar alrededor de un número mágico: 25.
Durante 20 años (1994-2004) el Estado cubano valoró para las empresas estatales el CUC igual que un CUP, pero para la población este cambio es 1 CUC – 25 CUP, lo que deformó completamente la economía nacional.
La circulación de esas monedas hizo que la composición social de los cubanos se modificara completamente, y se estableciera una división invisible pero muy real: los que tienen CUC y los que no los tienen.
A partir de la crisis económica cubana de los 90s, conocida como Periodo Especial, muchas personas se reorientaron laboralmente hacia sectores donde se cobraba una estimulación salarial en CUC. Por ejemplo, un profesor universitario cobraba 500 CUP, pero si se iba a trabajar como jardinero en un hotel cobraba 350 CUP de salario y más de 20 CUC de estimulación, lo que sumaba un total de más de 900 CUP de salario real.
A partir de este fenómeno la pirámide social y salarial de Cuba se invirtió completamente: los obreros, técnicos y personal de servicio que trabajaban en entidades estatales de rápido auge cobraban más que profesionales altamente calificados de otras instituciones del país.
También la aparición de las Tiendas Recaudadoras de Divisas contribuyó a esos cambios. Allí un refrigerador o cualquier otro electrodoméstico importado puede estar sobrevalorado hasta en un 240% de su precio debido a costos de importación y a tasas de ganancias muy elevadas, lo que disminuye el poder adquisitivo de la moneda nacional y aumenta la inflación en Cuba.
A lo largo de varios años el Estado cubano subió el salario de varios sectores profesionales con la intención de darle un justo reconocimiento salarial, como a maestros, a médicos, y abogados, y así evitar el éxodo hacia otros sectores, principalmente el turismo.
A pesar de estos intentos hoy todavía se ve que muchos profesionales cubanos trabajan en el sector turístico pero su formación es como Ingenieros, Maestros, Médicos o licenciados en especialidades que nada tienen que ver con la industria del ocio.
Los cubanos de hoy también ven la desaparición de la dualidad monetaria como algo complejo desde el punto de vista organizativo, pues todas las entidades tendrán que cambiar sus sistemas contables para gestionar un solo tipo de moneda, como hace cualquier empresa en el mundo, pero que el Cuba no se hace así desde hace más de 20 años.
Otros cubanos muy preocupados son los vendedores de dólares. Sí, existen, aunque es una acción penada por la ley. Por ejemplo, el Banco cubano o las Casas de Cambio S.A. (CADECA) te pueden vender dólares americanos para ir de viaje al extranjero a 0.96 centavos de CUC, pero ese vendedor ilegal que se apuesta en los alrededores de las CADECA te lo puede vender al mismo precio sin hacer la cola.
Ese vendedor de divisas juega con las mismas tarifas de CADECA a la hora de hacer los cambios en USD y en CUC y se gana en cada transacción un peso cubano o una fracción de USD. Por supuesto, que este vendedor hace una actividad ilegal y muy lucrativa, que desaparecerá cuando solamente circule una sola moneda oficial.
Denis es uno de esos vendedores de dólares. Cada día se coloca cerca de las CADECA o de las Tiendas Recaudadoras de Divisas para hacer negocios con cubanos y extranjeros que quieren cambiar sus monedas.
Aunque su “trabajo” es ilegal accede a ofrecer sus opiniones: “Las cosas han cambiado mucho ahora, como las tiendas aceptan las dos monedas ahora tengo menos ganancias yo, igual le pasa a mucha gente. Los únicos que siguen igual son los que cambian dólares americanos o euros a la gente que va a salir del país, que siguen como si nada”, dice Denis al lado de una CADECA de la ciudad cubana de Cienfuegos.
Mientras más habla sobre el tema más se altera, porque ve en la eliminación de la dualidad monetaria una ruptura de su modo de vida, y el de muchos cubanos, que han sobrevivido así 20 años, sacando ventajas de la dualidad monetaria.
“Eso de la reunificación va a ser una jodedera tremenda! Me va a joder el negocio! Yo cambiando CUC y USD me gano mis pesos cada día, es ilegal pero no importa. Cuando sea una sola moneda tendré que buscarme otra cosa que me de dinero, es que ya la gente en Cuba está acostumbrada al rollo de las dos monedas. Pero bueno, supongo que si se me jode el negocio a mi desaparecerán también algunas CADECA y siempre habrá gente que quiera dólares para viajar al extranjero, porque esos “papelitos” de aquí solo sirven acá dentro”.
En fin, la moneda oficial será…
Las últimas informaciones que circulan en Cuba sobre el tema de la reunificación permiten ver algunos datos para sacar cuentas de cómo será el poder adquisitivo de la moneda oficial cubana luego de la reunificación. Muchas empresas cubanas realizan un experimento en el cual manejan su economía con una sola moneda y se pasa a valorar los CUC de sus cuentas en divisa a 10 CUP y no en los populares 25 que rigen para la población. Y este mismo valor nominal será el que regirá para los trabajadores de la Zona Especial de Desarrollo del Mariel, especie de zona franca cubana que se planea sea la locomotora de la economía cubana.
Con los pocos datos oficiales que se emiten acerca del proceso de reunificación monetaria o eliminación de la dualidad monetaria, como también se ha descrito, toda la población cubana está atenta a cada detalle, pues en los detalles pudiera estar el desarrollo de la economía nacional, pues hasta los inversores internacionales miran con curiosidad este proceso, que debe durar aproximadamente hasta 2016, cuando cambie definitivamente el número mágico para los cubanos.
Solo entonces Marieta, Arsenio y Denis, esos cubanos preocupados por el fin de la dualidad monetaria, sabrán cuál es el número mágico para los cubanos, si 25, 10 o cualquier otro.
¿Dónde se han hecho los billetes que han circulado en Cuba?
Las primeras monedas y billetes cubanos fueron emitidos por el Banco Español de la Isla de Cuba en el período colonial (1492-1898). Luego de 1902 el patrón utilizado fue la plata y el referente el dólar estadounidense. A partir de 1914 la moneda cubana se hizo siempre en Estados Unidos. Hasta 1960 la producción de los billetes cubanos estuvo a cargo de impresoras estadounidenses, pero a partir de 1961 el papel moneda cubano comenzó a imprimirse en la Imprenta Nacional de Valores de la República Socialista de Checoslovaquia.
El Banco Central de Cuba desde su creación en 1997 ejerce la función de organismo emisor de la moneda nacional en el país, iniciándose ese mismo año la emisión de la primera Serie de billetes en pesos cubanos a nombre del BCC en Cuba, que son los primeros billetes y monedas cubanos hechos totalmente en suelo nacional.
Algo más acerca de la dualidad monetaria y cambiaria
La dualidad monetaria, sucede cuando circulan dos monedas diferentes: generalmente una extranjera y una nacional, o como en el caso cubano, dos nacionales. Puede ser parcial: cuando la otra moneda asume parte de las funciones del dinero (como unidad de cuenta, medio de pago y de atesoramiento), o total, cuando las asume todas.
La dualidad cambiaria, por otra parte, ocurre cuando existen dos tipos de cambio diferentes. En Cuba la situación se hace más compleja al utilizar en las relaciones económico-financieras del sector estatal, una apreciación de 1 CUP=1 CUC (un peso cubano igual a un peso convertible); y para la población de 25 CUP=1 CUC.
Monedas que han circulado en Cuba
Moneda Año Carácter
Doblón español 1492 – 1762 Oficial
Doblón español y Libra esterlina 1762 Oficial y permitida, respectivamente
Doblón español 1762 – 1868 Oficial
Peseta española 1868 – 1898 Oficial
Peseta española, monedas francesas de oro y Dólar americano 1898 – 1902 Oficial y permitidos, respectivamente
Peso cubano y dólar americano 1902 – 1959 Oficial y permitido, respectivamente
Peso cubano 1959 – 1993 Oficial
Peso cubano, Peso Cubano Convertible y dólar americano 1993 – 2004 Oficial, Oficial y permitido, respectivamente
Peso cubano, Peso Cubano Convertible y dólar americano 2004 – Actualidad Oficial, Oficial e ilegal
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