El aprendizaje de la lectura y la escritura es uno de los más importantes que se adquirirán a lo largo de la vida. Hacerlo de una manera significativa, motivante y estimulante será en definitiva la más valiosa aportación que una familia y una escuela puedan hacer para con sus niños.
La lectoescritura se crea y construye en cada una de las personas que la adquieren, depende directamente de las experiencias, las habilidades, el entorno y el significado que esta pueda aportar en la vida diaria de quien está aprendiendo.
Ser un ávido aprendiz, es una característica del ser humano.
Estamos inmersos en un mundo de aprendizaje y descubrimiento continuo.
Por delante tenemos todo un mundo por descubrir y una importante puerta de entrada al conocimiento es a través de la lectura.
Comprender lo que leemos, interiorizarlo e integrarlo a nuestras experiencias, para posteriormente, poder expresarlo y usarlo en la vida cotidiana. Acciones que aportan importantes beneficios para nuestro desarrollo integral dentro de una sociedad en la que predomina el mensaje escrito.
Actualmente encontramos mensajes escritos en casi todo lo que utilizamos, incluso el uso del teléfono es sustituido por mensajes de texto.
De ahí, lo valioso de comprender y expresar adecuadamente nuestras ideas/pensamientos a través de un conjunto de palabras.
Tanto en el ámbito escolar cómo en el familiar es muy importante que todo el proceso de adquisición se lleve de una manera respetuosa, basado en las experiencias, intereses y habilidades del niño. Al considerar estos elementos aseguramos la apropiación del aprendizaje de una manera significativa.
También, al considerar estos elementos, se quiebra la creencia sobre que los niños han de ser lectores y escritores autónomos al comenzar la primaria y con esto las exigencias por “presentar niños lectores” al concluir el curso.
Cuando consideramos que la educación formal ha de ofrecer oportunidad de experimentación, construcción y motivación, muchos padres y docentes sienten temor de que sus hijos no aprendan al ritmo al que lo hicieron ellos, como lo hacen sus hermanos mayores o incluso los mismos compañeros de clase.
Basarnos en este tipo de comparaciones y métodos tradicionales de enseñanza han dejado ver al paso de los años, estadísticas sobre un país que no tiene lectores, jóvenes que no comprenden instrucciones, incremento en la deserción escolar y por tanto una calidad educativa deteriorada.
La base del conocimiento se da desde los primeros años, son estos los más importantes, en los que se crean hábitos, gusto y disfrute por las actividades manuales, motoras, intelectuales y de sociabilización.
Hemos de aprovechar al máximo la inminente curiosidad y ganas de aprender de los pequeños para poder llenarlos de experiencias significativas, para poder interesarlos en la ciencia, las artes, las letras y todo aquel interés que surja de su imaginación.
No limitarlos a planas eternas, lecturas sin sentido, repeticiones de frases descontextualizadas.
Ser niño es la mejor experiencia de la vida, ser maestro la mejor oportunidad para ser parte de la construcción de aprendizajes, ser padre es la oportunidad de reconciliarnos con nuestro niño interior al ser unos mejores seres humanos a través de nuestros hijos.
No desaprovechemos la oportunidad que nos da este día y este momento para poder disfrutar del ser unos aprendices de las letras.
En las siguientes 4 entregas veremos 200 actividades para favorecer la adquisición de la lectoescritura en preescolares
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¡gracias por leer y compartir!
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