A la pobre Cospedal no le salen las cuentas. Y es que no se puede pedir peras a un olmo. Ella es de letras. Y además pepera. Y no da más de sí. Pero claro, la tenemos manía, porque es mujer y porque es transparente con sus cuentas, y las publica, es pura envidia. Lástima que no cuadren.
Un personaje de su talla, y más ganando el dinero que gana, debería tener un administrador de sus riquezas y así evitaría que ni con calculadoras le salieran las cuentas. La pobre lo intenta pero ¡qué difícil!:
- Mariano, ¿cuánto es el cincuenta por ciento de 168.000 euros?
- A mí que me cuentas, si yo soy de letras. Le contesta despechado Mariano.
- Y además me has descubierto, ¿quién eres tú para decir que ganas lo que ganas? Ahora, los de ciencias echan cuentas y saben que yo no puedo ganar lo que dije.
La cosa no es tan sencilla. yo he tenido que recurrir a un ingeniero agrónomo, y es que los datos son los siguientes:
En 2008 Dª Dolores, por seis meses de trabajo como secretaria general del PP declaró: 64.473 euros. Sin embargo, en 2009, por todo el año llegó a 167.865. O sea, en matemáticas de hoy, le han aumentado el sueldo más de un 30% --167.865 sobre 128.946--, en época de vacas flacas (a este sueldo habría que añadir lo que cobra como senadora, trienios y varios hasta un total de casi 242.000 Euros).
Los matemáticos están estudiando seriamente una nueva ley por la que 64.473 € sea el 50% de 167.865 €, inexplicable ni con la física cuántica. Y así demostrar que tiene razón cuando dice que no la han subido el sueldo el 30%, ni nada, y apoyar su tesis de que quien dice eso, miente.
Y por otro lado, el más difícil todavía --también se está estudiando, en este caso ingenieros nucleares—, cómo probar que 112.000 € son más que 167.865. Todo para demostrar que Rajoy no mintió al decir que ganaba 8.000 € al mes ( o sea 112.000 al año si contamos 14 pagas). Y es que nadie se cree ni parece normal –¡somos unos incrédulos!— que Rajoy gane menos que su pupila.
Pero no se preocupen, tranquilos. Aquí no pasa nada, desde hace tiempo estamos inoculados con la vacuna de la falsedad para prevenirnos de estos políticos. Y aquí paz y después gloria.
Principio Cospedal-Rajoy: Todo sueldo pepero sumergido en Génova solamente es explicable por quien lo cobre. Es inútil compararlo con otros o con el mismo de años anteriores. No responde a los principios aritméticos clásicos y se ha de tomar como lo que es: dogma de fe.
Salud y República
P.D. Las caricaturas son de Kikelín