Opinión personal:Lo primero que llamó mi atención de este libro fue su título y, después, su portada; también sumó algún punto el que la autora fuera italiana (a excepción de un libro, el resto de los que he leído pertenecientes a autores italianos me han gustado mucho), aunque cuando leí su sinopsis dudé, ya que por lo que se cuenta parece tratarse de una historia juvenil romántica como tantas otras. Para mi grata sorpresa, estaba totalmente confundida con respecto a esta última conclusión.
Nos encontramos con una Alessandra, protagonista de esta historia, que está sumida en un océano de dolor y soledad debido a la pérdida de su madre, que ha fallecido por cáncer. Por este motivo ella sola se aísla del resto del mundo: no quiere hablar con sus amigas y mucho menos con sus compañeros de clase, así que decide abandonar el mundo real para comenzar a formar parte de Cerolandia, al lado del pupitre de Gabriele, el chico marginado y misterioso de clase, que le ofrece el silencio y la soledad que ella anda buscando.
Poco a poco, con unos capítulos bastante breves, la autora nos va desgranando la historia de Alessandra y Gabriele, cómo va evolucionando paso a paso su relación, el estado anímico por el que pasa Alessandra, el mundo en el que ambos se mueven, los problemas que tiene cada uno de ellos... Y lo mejor de todo es la relación de ambos, ya que no es un romance como cualquiera de los que se encuentran últimamente en los libros juveniles: ambos son diferentes, cada uno tiene sus propios problemas y por eso mismo su relación es rara y especial.
La amistad es un tema que está bastante presente en el libro: desde las amigas y compañeras de universidad de la madre de Alessandra, que en ningún momento la abandonan a pesar de que su madre ya no esté; hasta las propias amigas y compañeras de Alessandra. Y en este punto, a pesar de que el comportamiento de la protagonista a veces me desquiciara, entiendo muy bien a Alessandra, porque poco a poco va descubriendo como eran esas amigas realmente. También hay hueco para el tema del acoso y el maltrato en general. Me ha gustado que la autora tocara diferentes temas dentro de la historia, y más de la forma en la que han aparecido.
El ritmo del libro es bastante ágil, y en ello ayuda que los capítulos sean tan breves -ya que la historia está contada por días, aunque de vez en cuando aparece algún recuerdo que tiene Alessandra sobre su madre- y lo poco predecible que es. En cuanto al estilo de Paola Predicatoria... me ha gustado mucho. He disfrutado con su forma tan sencilla y delicada de narrar la historia, de las descripciones de los sentimientos de la protagonista, de sus pensamientos... la verdad es que no puedo ponerle pegas.
Respecto al final del libro, solo puede decir que me ha parecido como toda la historia en si: sorprendente e inesperado. Creo que es un final perfecto para la historia que se narra y los personajes que la protagonizan.
La lluvia en tu habitación es una historia original y sorprendente, narrada con delicadeza y sencillez; un romance del estilo de Alessandra y Gabriele: extraño, diferente y único; con un final que no podrás prever.
Puntuación:Gracias a Salamandra.