¡Tenemos nueva habitante en los tejados de la Gran Vía! Al romano, a Diana Cazadora y a otros tantos se suma, desde hace pocos días, una enorme loba. ¿Por qué? Lo cierto es que parece que está "de moda" recuperar elementos del antiguo Madrid, es lo que ha sucedido hace una semanas con el templete de la estación de Metro de Gran Vía y lo estamos viendo ahora mismo con esta enorme escultura.
Resulta que en este punto, ubicado en el número 18 de la Gran Vía, estuvo el Hotel de Roma. Fue curiosamente el primer edificio que se terminó por completo de esta avenida, en octubre de 1915 y albergó uno de los primeros hoteles de lujo de la capital. Un inmueble de 6 plantas cuya inauguración se reseñó así en la prensa de la época: "La primera construcción que se ha inaugurado en la Gran Vía ha sido la destinada al Hotel de Roma, hermoso edificio que por su severidad suntuosa será uno de los que más embellezcan el primer trozo de la calle y por su índole, el que mayor animación le proporcione". Incluso el mismo rey Alfonso XII asistió a la inauguración y disfrutó de "un espléndido lunch, bebiendo el champagne en una artística copa de oro".
El Hotel de Roma fue uno de los más importante de la ciudad en aquella época, incluso el alcalde de Madrid tenía su propio despacho dentro del hotel. Como guiño a la ciudad que le daba nombre se optó por coronarlo con una réplica enorme de la loba capitolina, loba que según la mitología amamantó y crió a Rómulo y Remo dando origen a la leyenda sobre la creación de la ciudad de Roma.
Tras la Guerra Civil el hotel dejó de funcionar como tal y se eliminó la escultura de la loba. Después el edificio albergó las oficinas del Banco Ibérico y por último la Consejería de Justicia de la CAM. Ahora está en plenas obras para convertirse en un centro comercial de la marca Wowshop y sus nuevos dueños han optado por recuperar este bonito elemento que, como podemos ver en varias fotos antiguas, le daba un aspecto fabuloso y mucho lustre a este tramo de la Gran Vía.