A pesar de que el móvil no dispone de una cámara en condiciones, no me pude resistir a inmortalizar la preciosa postal que nos ofrecía el cielo.
Al atardecer, la Luna, Venus y Marte jugaban con sus destellos dignos de toda atención, pues brillaban más que cualquier día.
En todo el trayecto, desde que salí de casa hasta que llegué a mi destino, no pude dejar de mirar hacia arriba. Admiraba, entusiasmada, lo que hoy se convertiría en triángulo amoroso astronómico.
Y es que esta tarde al atardecer, podremos observar el triángulo formado por estos tres elementos: la Luna juntos con los planetas Venus y Marte.
Observables a simple vista, sólo necesitamos un buen lugar desde donde podamos contemplarlo sin obstáculos.
Sería perfecto si además disponemos de una buena cámara de fotos.