Revista Opinión

La Madre Caníbal de Kurim

Publicado el 10 mayo 2019 por Carlosgu82

Lo que leerán a continuación es un hecho real, sucedió en la ciudad de Kurim, República Checa, en el año 2006.
Klara Mauerova era la madre de 2 niños, Ondrej y Jakub, vivia con un hombre mayor, quien era el padre de los niños. Años después de vivir una relación tormentosa este decide abandonarla debido al carácter complicado de la mujer. La soledad se apoderó de Klara y para sentirse mejor invitó a su hermana menor Katherina a vivir en su casa junto a sus 2 hijos, ambas mujeres tenían una personalidad similar, compartían ciertas creencias e ideologías, además padecían esquizofrenia aguda y por lo tanto su salud mental era bastante desequilibrada y vulnerable.

Más tarde cuando Klara estudiaba pedagogía en la universidad de Kurim, conoce a Barbora Skrlová, una mujer de 32 años que padecia hipopituitarísmo, una enfermedad muy particular, debido a que las personas que padecen dicha enfermedad no producen una cantidad normal de hormonas, entre ellas las de crecimiento y esto le permite a estas personas tener la eterna apariencia de un niño/a de 13 años.

De Barbora se dice que desde muy temprana edad fué una chica muy problemática, además de su condición presentaba muchos desórdenes mentales, poseía una crueldad desmesurada, la cual su familia no podía controlar y con el paso de los años se fué desquiciando cada vez más, hasta el punto de ser internada en un hospital psiquiátrico, en donde comenzó a hacerse pasar por una niña.

Durante el tiempo en el cual Klara y Barbora se conocían, Barbora se victimizaba alegando que vivía huyendo de las abusivas casas de acogida y del maltrato de sus padres, Klara creyó su historia, pensaba que Barbora era una pobre niña desvalída y fué entonces cuando la invitó a vivir a su casa junto a su hermana Katherina y sus 2 hijos.

Para Barbora, era muy fácil manipular a ambas mujeres, debido a sus vulnerables estados mentales. Barbora era miembro de una organización religiosa llamada el Movimiento Grial, cuya secta se comunicaba con sus miembros a través de mensajes de textos y cuyo líder era un loco apodado «El Doctor», esta secta promovía a sus miembros a mantener constantes relaciones sexuales con los otros miembros de su misma familia, es decir, aquella secta promovía el incesto, con el supuesto objetivo de «Mantener pura la energía», además de promover la promiscuidad y el canibalismo.
Como era de esperarse, Barbora convenció a Klara y a Katherina a unirse a dicha secta. Ambas mujeres dentro de sus delirios siempre habían tenido supuestas visiones místicas y les pareció que Barbora y esta supuesta «Iglesia» eran parte de su destino.

Todo parecía ir muy bien para las 3 desquiciadas mujeres, sin embargo Barbora sentía cierta incomodidad y celos por los niños, ya que Klara dedicaba más tiempo a ellos y debido a esto Barbora estaba decidida a deshacerse de ellos y con la excusa del Movimiento Grial y el supuesto mal comportamiento de los niños Barbora manipuló a Klara y la convenció de encerrarlos en una jaula de hierro en el sótano como parte del ritual que siempre llevaban a cabo.

Con el paso del tiempo dejaron de darles la comida y por lo tanto los niños comenzaron a deteriorarse muy rápido debido a la falta de alimentos y la deshidratación, su estado de salud era precario, los golpeaban, e incluso eran víctimas de constantes torturas, al grado tal de ser quemados con cigarrillos, los amordazaban, intentaron ahogarlos, recibían descargas eléctricas y además de dejarlos desnudos les arrojaban agua fría con cubetas.

Hasta que finalmente guiadas por la secta idearon un plan mucho más malévolo, comenzaron a engordar a los niños con el fin de comérselos lentamente y practicar el canibalismo, así que cada vez que preparaban el ritual, bajaban al sótano cortaban trozos de carne de las piernas y brazos de los niños y posteriormente se los comían.
Ondrej fué el primero en ser comido, a su hermano Jakub le tocaba observar con horror como su madre cortaba trozos de carne de las extremidades de su hermano para posteriormente comérselas. Más tarde Jakub correría con la misma suerte. Ambos niños tuvieron que soportar las horribles torturas a lo largo de todo un año.
Barbora era paranoica y creía que los niños podían escaparse en cualquier momento, por lo que en mayo del 2007 decidió comprar una cámara para vigilar a los niños en el sótano, como no tenia suficiente dinero compró una cámara para bebés y la instaló en el sótano cerca de una ventana. Desafortunadamente para ella y afortunadamente para los niños, la señal que emitía la cámara comenzó a escaparse del sótano. Y los vecinos que recientemente habían tenido un bebé compraron una cámara exactamente igual para vigilar a su bebé. Así que una noche mientras el vecino revisaba su cámara, las señales se cruzaron y pudo acceder a las imágenes que emitía la cámara de Barbora. Este completamente asombrado no podía creer lo que veía, pudo notar que habían 2 niños desnudos encerrados en una jaula en un sótano y en muy mal estado, e inmediatamente llamó a la policía. Pasaron varios días antes de descubrir que las imágenes captadas provenían de la casa de Klara. Pero finalmente cuando llegó la policía a la casa de Klara bajaron al sótano y pudieron apreciar que el hedor a sangre podrida, orina y excremento eran insoportable, encontraron a los 2 niños dentro de una jaula en muy mal estado de salud, con signos de tortura extrema y recostados sobre sus propios excrementos. Fuera de la jaula había una tercera niña que lloraba aterrorizada. Esta se presentó como Anika y confesó todo muy rápidamente culpando a Klara y Katherina de los horrendos crímenes.

Los niños fueron hospitalizados y uno de ellos no logró sobrevivir.

Mientras la policía investigaba, Anika, quien obviamente era Barbora aprovechó la oportunidad y escapó.
Barbora huyó a Noruega, donde cambió su apariencia física, engordó, se cortó el cabello, se hizo pasar esta vez por un niño llamado Adam y consiguió a una nueva familia.

Afortunadamente y debido a la activación de una búsqueda internacional Barbora fué capturada y condenada a prisión, se le acusó de ser la autora intelectual de los crímenes cometidos dentro del seno de la familia Maeurová.

Barbora fué sentenciada a 7 años de prisión, pero solo cumplió una condenada de 5 años, ya que posterior a eso fué puesta en libertad por buena conducta y desde el 2011 nadie sabe su paradero.
Mientras que Klara fué condenada a 9 años y su hermana Katherina a 10 años.

Cabe destacar que esta cruel historia inspiró a la realización de una película llamada la huérfana, escrita por David Leslie Johnson y dirigida por Jaume Collet-Serra, la cuál se estrenó en julio del año 2009.


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