La Málaga más desconocida y perfecta para ir en familia: Axarquía

Cuándo hablamos de ir de vacaciones a Málaga, la mayoría de las personas suelen interpretar que nos referimos a la propia capital o a algunas de las localidades costeras típicas. Hablamos de las bulliciosas Fuengirola, Benalmádena, Torremolinos, Marbella o Estepona.

Nadie pensaría que nos referimos a Algarrobo, Torrox o Frigiliana, pertenecientes a la comarca más oriental de la provincia Axarquía.

Ya el mismo nombre parece misterioso. Axarquía es una palabra de origen árabe que hace referencia a la situación hacia el Este de un lugar y que en la provincia de Málaga ha pervivido como denominación de su comarca más oriental.

Axarquía es un misterio en sí misma. Tiene un paisaje muy accidentado por la cercanía de la cordillera Penibética al mar, con un pico La Maroma de 2069 metros de altitud, con importantes viñedos y un zona costera con numerosas playas acondicionadas de forma perfecta para el turismo familiar.

Esta comarca cuenta con numerosas localidades dignas de una escapada o unas vacaciones en función de nuestros gustos: interior o litoral. Si bien las localidades antes mencionadas son menos conocidas, si hay otras más popularizadas como Rincón de la Victoria o Nerja, donde se rodó la archifamosa serie de televisión ‘Verano Azul’.

En este caso nos vamos a centrar en tres zonas bastante diferentes entre sí: la que compone el eje Torre del Mar, La Caleta de Velez Málaga y Algarrobo Costa; la mencionada Nerja y para los que buscan la montaña, la exótica Frigiliana.

Torre del Mar-La Caleta-Algarrobo

Es una franja costera repleta de playas con diferentes localidades unidas entre sí. La más grande es Torre del Mar, con numerosos apartamentos, hoteles y multitud de chiringuitos con las clásicas barquitas (con el famoso ojo fenicio que según las creencias ancestrales, se utilizaba para asustar y mantener bajo el agua a los monstruos marinos) donde se cocinan pescados a la brasa y donde destacan, al menos para mí,  sus increíbles espetos, esas sardinillas  que se asan ensartadas en un barrilla en vertical.

Pero si hay algo que llama especialmente la atención es su conocido paseo marítimo con sus 4 km a pie que llega hasta el puerto pesquero de la Caleta de Vélez. en verano hay un popular mercadillo y numerosos chiringuitos donde tomar algo. Es un placer pasear con los niños después de un tórrido día con la brisa del mar y con la opción de que jueguen en las atracciones infantiles.

Pero no descartemos las otras localidades, quizás menos bulliciosas, pero también con una gran vida turística.  Algarrobo Costa y su playa de la Mezquitilla o la playa de la Caleta de Vélez son dignos ejemplos para pasar unas vacaciones increíbles en familia.

Si te interesa un poco de cultura puedes visitar en el pueblo Algarrobo la iglesia de Santa Ana es el monumento más notable de la arquitectura religiosa de Algarrobo, las ermitas de la Virgen de las Angustias y de San Sebastián y uno de los yacimientos arqueológicos más interesantes del Mediterráneo occidental: la Necrópolis de Trayamar. Este complejo de tumbas paleopúnicas pertenecían a una ciudad fenicia posiblemente surgida en torno a una factoría del siglo VII a.C.

Si pasas por allí en la costa de Algarrobo verás dos torres vigías cuya función era advertir a la población de posibles invasiones enemigas. Una de ellas es de origen árabe, mientras que la otra data del siglo XVI.

Nerja

Este municipio reúne un gran número de elementos de interés, hasta tal punto que se ha convertido en uno de los centros turísticos más importantes de la Costa del Sol.

Su belleza paisajística abarca desde la espectacular montaña, al mar, con estupendas playas, pasando por la fertildad de sus huertas, que convierten esta zona en un auténtico vergel.

Además de esto, Nerja cuenta con lugares inolvidables como la Cueva de Nerja, una de las más bellas y visitadas de España, de gran valor arqueológico; los acantilados de Maro, declarados Paraje Natural; y, dentro de la ciudad, el Balcón de Europa o la Iglesia del Salvador.

Nerja cuenta con 13 kilómetros de costa divididos en 16 playas de aguas cristalinas. Su orografía particular ofrece a turistas y visitantes una amplia oferta de playas de manera que pueda elegir entre playas más familiares, como Burriana o El Playazo, calas urbanas, como El Salón, Calahonda o Carabeillo y otras calas vírgenes más alejadas del centro como la Playa de Maro, El Cañuelo o Las Alberquillas.

Varias playas del municipio han sido distinguidas con la Bandera Azul, tanto por la calidad de sus aguas como por los servicios que las mismas ofrecen.

Además, sus playas son referentes en todo el mundo por su belleza inigualable, especialmente destacan las calas vírgenes que forman parte del Paraje Natural de los Acantilados de Maro-Cerro Gordo, rincones únicos en los que poder evadirse y disfrutar de nuestros fondos marinos.

Destaca también, La Cueva de Nerja: una de las cuevas más espectaculares de España. Declarada Bien de Interés Cultural en 2006, es una maravilla natural que está abierta a los visitantes durante todo el año.

En cuanto a la su gastronomía, el pescado se encuentra como protagonista en la mayoría de los platos típicos de la localidad tales como: en blanco, cazuela de fideos, espetos o como acompañante en platos como las populares migas de harina que se acompañan también de uvas, naranja o ensalada arriera.

Es famoso por aquellos lares el choto a la mareña, una tradicional receta que se ha pasado familiarmente de generación en generación y que se suele cocinar en fechas señaladas.

Frigiliana

Frigiliana es un pueblo pequeño del interior situado a una altitud de 300 metros y con apenas 3.000 habitantes. Está considerado por muchos el más bonito de Andalucía y quizás de España. Aún siendo turístico, conserva su autenticidad y todavía no está masificado.

Su plaza es perfecta y desde distintas partes del pueblo hay unas vistas en alto impresionantes desde las que se divisa el mar.  Destacan sus calles empedradas, sus casas blancas decoradas con flores y puertas de colores. Muy cerca de la plaza se encuentra los Reales Propósitos, el silo donde se almacenaba antiguamente el grano,  referencia  para coger la Calle Real y hacer lo mejor de Frigiliana, callejear y perderte por sus callejones y pasadizos.

Tiene una gastronomía excepcional, como sus famosas berenjenas con miel de caña, que se produce en la última fábrica que queda en Europa. Tiene también una gran oferta de hoteles y casas rurales, decoradas con mucho gusto e incluso con piscina, como la Posada Morisca, los Apartamentos Rosamarina o el Hotel Villa Frigiliana.

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