Vas a tomar el avión y en el aeropuerto “desfilan” frente a ti varias máquinas dispensadoras de dulces, chocolates y bebidas. Seguramente eres de los que alguna vez compró algún producto así. Ahora el Gremio de Porto Alegre empezó a experimentar con algo más: una máquina dispensadora de camisetas de su equipo de futbol que nombró “Máquina Tricolor Express”.
Quienes circulen por el aeropuerto Salgado Filho de Porto Alegre, Brasil, encontrarán una máquina dispensadora del Gremio, que aceptará pagos con tarjeta de crédito o débito. ¿El producto? La camiseta oficial del club, que compite contra el Inter de Porto Alegre por ser el más popular de la ciudad, y que con este experimento busca probar que vender sus camisetas oficiales de manera “express” es posible.
La misma idea ya había sido implementada en septiembre de este año durante el banquete de aniversario del club y vendió 80 camisetas en 1 hora. La idea del club es, que si el experimento tiene éxito, se instalen más máquinas en bares, restaurantes, supermercados y otros espacios públicos.
“El concepto de esta máquina tricolor es nuevo en el segmento del futbol, así que necesitamos entrar al mercado de manera experimental, pero considerando la facilidad de distribución, junto con la accesibilidad, practicidad e instantaneidad con la que el producto llega al comnsumidor, estoy seguro que será un producto exitoso”, comenta Beto Carvalho, ejecutivo de marketing del club brasileño.
Pros e ideas para mejorar
Como toda estrategia en fase experimental, el Gremio seguramente tomó en cuenta algunos aspectos y sacará resultados positivos y negativos, para después optimizar su estrategia o cambiarla por completo.
Pros
- Una máquina dispensadora apela a una compra de impulso. ¿Y qué mejor lugar que un aeropuerto para llegar al público objetivo que podría gastar al rededor de $1,200 pesos?
- La idea es tan innovadora, que ha sido replicada en medios de todo el mundo, lo que sirve para alcanzar otro objetivo del club: exposición de su marca.
- Si la gente compra productos por internet sin antes haberlos visto en vivo, ¿por qué no nos compraríamos una camiseta de futbol “a ciegas”? De todas formas, el target seguramente ya está seguro de cuál es la talla de camiseta que mejor le queda. No hay pierde.
- Colocar la máquina en la terminal del aeropuerto de la ciudad cumple con un propósito fundamental: “marcar” su territorio frente al Inter de Porto Alegre en un lugar donde convergen tanto turistas como locales. Algo así como un “graffiti” que impulsa la presencia de un club frente a su adversario de ciudad a la vista de todo el mundo.
- Los grandes aficionados al futbol no llevamos cualquier “souvenir” de regreso a casa. Preferimos comprar la camiseta (o por lo menos algún accesorio) del club local como recuerdo, y esta máquina sería la opción ideal para todos nosotros. Además, ¿qué mejor recuerdo de Brasil para un turista extranjero, que algo relacionado con futbol?
Ideas para mejorar
- Habría que revisar a qué precio se venden las camisetas en esta máquina. Generalmente, en los aeropuertos este tipo de productos son más caros que en otros establecimientos. Si fuera el caso aquí, sería un gran error. Si el precio es el mismo que en tiendas, muy bien por Gremio.
- La máquina está colocada en la zona de salidas del aeropuerto, así que sólo cumple con el cometido de una compra de último momento para los foráneos. Para los locales que salen de viaje, se limitaría a una compra de regalo, ya que los interesados en tener la camiseta de su club probablemente la tengan desde su lanzamiento.
- Sería interesante que el club colocara otra máquina en la zona de llegadas. Aunque muchos viajeros lo único que quieren hacer es llegar a su hotel o casa a descansar, causaría mayor impacto ver los colores del Gremio en cuanto lleguen a la ciudad. Además eliminaría el riesgo de que un turista compre la camiseta en otro establecimiento durante su estancia en Porto Alegre, al no saber que tiene la opción de adquirirla en el aeropuerto, en menos de 1 minuto.
- Aunque en la foto no se puede apreciar la variedad de productos, probablemente se limite a camisetas para hombre, mujer y niño en diferentes tallas. Después del período de prueba de 90 días, Gremio podría incluir otro accesorio a la oferta, como una bufanda, una bandera o una gorra, para así cubrir a un público más amplio, con la idea de quienes no quieran o puedan comprar una camiseta, por lo menos se lleven otro producto de un precio mucho menor.
- Aunque la idea implementada busca evitar distracciones y limitarse a vender una camiseta, el club podría aprovechar el espacio de la máquina o el anuncio colocado arriba, para promocionar sus redes sociales o buscar alguna otra acción por parte del comprador y quienes ven la máquina. Seguramente el club probará distintas estrategias después de esta prueba inicial de 90 días.
¿Qué te pareció la idea del Gremio de Porto Alegre? ¿Crees que tenga éxito y sigan experimentando en otros espacios? ¿En qué otros espacios podría funcionar colocar una máquina así?