Donna Simpson ha decidido acabar con su reto de convertirse en la mujer más gorda del planeta. A pesar del partido que está sacando a su propio desafío, gana 90.000 dólares al año por dejar que la vean comer, la mujer ha decidido que ha llegado el momento de empezar una dieta y su sitio web se convertirá en un blog en el que se podrán seguir sus progresos con su nueva vida.