La sala de lo civil del Tribunal Supremo ha hecho pública la Sentencia de Pleno 277/2022, de 31 de marzo, en la que se afirma que “la gestación por sustitución comercial vulnera los derechos fundamentales reconocidos en la Constitución y en los convenios internacionales sobre derechos humanos”.
Son muchas las cuestiones éticas implicadas en la práctica de la maternidad subrogada: la ponderación del deseo de los adultos por encima del derecho natural de los hijos a tener un padre y una madre, la instrumentalización de la mujer que lleva a cabo el embarazo, la mercantilización de la vida y la dignidad humana, la selección genética del hijo y la deconstrucción de la institución familiar.
El Tribunal señala que la maternidad subrogada supone una “vulneración de los derechos de las madres gestantes y de los propios niños, tratados como simples mercancías”.