Detrás, delante, debajo y encima de todo “esto” hay una Mente Creadora que hace que Yo sea yo, Tú seas tú y los dos seamos lo mismo. Nos podemos ver como un Todo o como los infinitos algos que lo componen, igual que un puzzle y sus piezas o una fotografía y sus fotogramas.
La Mente proyecta “fuera” todo aquello de lo que está constituida: familia, amigos, compañeros, trabajo, paisajes, sensaciones, estrellas, universos, planetas, pasados, futuros, presentes, miedos, placeres, emociones, parejas, experiencias…cada uno con unas características, particularidades y perfiles específicos.
No es que haya múltiples mentes minúsculas y cada una refleje algo de si. Sólo existe una y cada uno de nosotros y todo lo que nos rodea (lo conozcamos o no) es una Creación de ella. Por eso estamos interconectados, no hay separación. El Mar no es “una masa de agua salada”. El Mar es Mar..lo otro es una definición…igual que la Unidad no es el conjunto de sus componentes.
Esto quiere decir que mis pensamientos, aunque sea yo quién los piense, no provienen de mí, por lo tanto no son míos. Es como si yo fuera un recipiente y “alguien” me llenara de agua.
“Nada es lo que parece” porque nada de lo que vemos es real.
La Gran Pregunta ahora para mí es:
¿Cuál es el propósito de todo esto?
El Ser Humano (si es que existe como tal..), ¿para qué ha sido Creado? Una Rosa, en principio…, su único fin es Ser. Pero ¿y nosotros? ¿Hay alguna “misión” más allá de la de Vivir? ¿Cuál es el motivo de nuestra existencia?
¿Quién o qué me puede asegurar que yo no soy un programa informático “puesto en marcha” para recoger datos para “no sé”?
Y si hay una Mente exclusiva-mente…, ¿quién la Creó a ella?
Por mucho que se investigue, la Verdad nunca podrá ser hallada porque siempre habrá “algo más” que esté fuera de nuestro alcance, así que ¿para qué me voy a seguir preguntando si jamás encontraré la respuesta?
Siendo consciente de todo este misterio y de que seguramente “yo” sólo soy un sueño…¿para qué preocuparme por “nada” si nada existe y todo está controlado por esa Mente que hará conmigo lo que desee?
Entonces, ¿dónde queda mi libre albedrío? ¿O es que tampoco existe..? Si no lo tengo, tampoco tengo la opción de Elegir “lo que sea” aunque “mi mente” me haga Creer lo contrario, ¿no?
Como no tengo ni idea, la conclusión a la que llego es:
Qué más da Quién soy, de dónde vengo y a dónde voy. Qué importa si es mi mente o la “de otro” la que mueve mis hilos. Aunque supiera todas esas respuestas nada cambiaría porque nada podría hacer. Lo único que me queda es aceptar que no sé nada ni puedo saberlo, con-vivir con esa incógnita “lo que me queda” e intentar Ser “mi pareja ideal”, mi Alma Gemela..
Si tuvieras que escoger a una persona para pasar el resto de tu Vida, ¿te elegirías a ti?
Si es que no…entonces ya sabes los motivos de tu “sufrimiento” y cómo acabar con él.
Aunque..qué más da si no soy “yo” quien lo va a decidir.
¿O sí..?