Actualmente, el icónico edificio de cristal de la Apple Store de la quinta avenida en Nueva York se encuentra en remodelación.
Una mini versión de la tienda hizo su aparición en la esquina de la calle East 23rd y Park Avenue en Manhattan.
Se trató de una acción realizada por el grupo de bromistas profesionales Improv Everywhere que convirtieron un elevador subterráneo en la entrada de la falsa tienda colocando los logotipos de la empresa de la manzana.
Pero no se detuvieron ahí, organizaron una fila de al menos 50 personas sobre la acera, por supuesto no podían faltar los falsos empleados equipados con una versión de playeras azules con los logotipos de la compañía incluidos.
El escenario completo logró atraer las miradas de los transeúntes que intentaron involucrarse como compradores, sólo para descubrir que no era cierto.
Una acción que aprovecha el momento de furor por la potencial adquisición del nuevo modelo de iPhone, al menos por parte de los seguidores más leales de la marca.