Justo después de colgar la primera parte de esta nota me entero que se ha iniciado un cierto conflicto entre Hamas y el Estado Islámico, que puede inducir a alguien a pensar que el planteo que hacía en mi nota es erróneo.
Aparentemente lo ocurrido es que la semana pasada volvieron a lanzarse misiles sobre Israel, pero esta vez no fue Hamas que parece haber aprendido la dura lección de la última guerra con Israel y considera que en este momento atacar a Israel con misiles es extremadamente peligroso, sino miembros del Estado Islámico. Después del ataque Hamas localizó y detuvo a los que habían efectuado el ataque y se produjeron enfrentamientos entre la policía de Hamas y los partidarios del Estado Islámico en los que murió un miembro de los yihadistas.
Estos hechos no contradicen en absoluto lo que manifestaba en mi nota. El conflicto está en las tácticas, pero los objetivos son comunes y no se discuten, aparte que la razón de que además de suníes y chiitas haya cientos de organizaciones, grupos y facciones dentro del Islam radical es porque sus discusiones sobre tácticas, procedimientos y normas son frecuentes, pueden llegar a ser muy calientes y en ocasiones causan víctimas mortales, pero los objetivos y la ideología siguen siendo la misma. Cualquiera que conozca Oriente Medio sabe que la contradicción es un rasgo habitual, y que lo que hoy es blanco mañana es negro y pasado mañana vaya usted a saber, y solo a base de mucho tiempo y mucha curiosidad uno acaba enterándose, más o menos, de por dónde van los tiros.