Revista Insólito
La muerte es la puerta de acceso a la eternidad, es simultáneamente nudo y ruptura, presente en muchas de las culturas de nuestro gigantesco planeta y vista y comprendida desde muchos ángulos: La diversidad es nuestra única herencia. En el caso especial de los Paganos, y de aquellas religiones y/o culturas que aún conservan una raíz proveniente de la Tierra misma, un momento de cambios y grandes transiciones se avecina. Para los Paganos, este momento (que es uno de nuestros Sabbats más importantes) es nombrado SAMHAIN. Samahin es un momento de oscuridad, pero no entendamos “oscuridad” con connotaciones negativas solamente, se refiere a la oscuridad en todo el sentido abstracto que se le pueda otorgar a esa palabra. Samahin representa la parte oscura de las estaciones del año. Durante este Sabbat, los Paganos aguardamos la muerte de nuestro gran Señor, quien regresa nuevamente al vientre de la Gran Madre. Por eso, además de ser un final, es también un comienzo y el inicio de un nuevo año.