Datos técnicosTítulo: La mujer del relojAutor: Álvaro ArbinaPrimera edición: enero de 2016
SinopsisLa mujer del reloj, una novela de carácter histórico, a caballo entre el thriller y el género policíaco, transcurre a lo largo de los cinco años que duró la guerra de la Independencia (1808/1813). Describe la aventura que vivirá Julián de Aldecoa Giesler, un joven de dieciséis años que emprende un largo viaje por el país en guerra tras el rastro de su padre, quien, asesinado en extrañas circunstancias, no puede contarle el codiciado secreto que desde hace años protege su familia. Tales circunstancias atraerán al frío y calculador general francés Louis Le Duc, un hombre que esconde un terrible pasado lleno de odio y venganza. Empujado por su locura personal, perseguirá sin descanso al joven Julián. Este tratará de luchar contra las fuerzas que le amenazan en un intento por reemprender el camino hacia sus verdaderos sueños, los sueños de su padre.
AutorÁlvaro Arbina es un arquitecto nacido en Vitoria-Gasteiz, Álava. Actualmente colabora con una empresa de arquitectura y diseño. La mujer del reloj es su primera novela.
Opinión personalCuando empecé a ver lecturas conjuntas en Twitter y reseñas en blogs de este libro, aunque la historia me seducía, me empezó a dar vértigo: las expectativas eran muy altas y podía llevarme un gran batacazo.Pero pensé: «¿Qué puedes perder?, ¿ocho euros y un poco de tu tiempo? Y la compré. Y empecé a leer y ya la recomendaba, y afirmaba que seguro que iba a ser una de las mejores lecturas de mejor 2016. ¡Y estamos en febrero!Pues sí: la novela me ha encantado. Por muchos motivos: una historia atrayente, una forma de escribir impecable (y sorprendente para una ópera prima de una persona que tiene veinticuatro años), una tensión que avanza progresivamente según pasamos las páginas y un desenlace con un giro magistral que remata una novela redonda.Y eso que salía con muchos prejuicios míos en su contra: no me gusta el siglo XIX (menos aún la Guerra de la Independencia) y el protagonista es un adolescente, que también me provocan «rechazo».Ambientada en Vitoria, en Cádiz, en Madrid y en otras ciudades de España, en el período de la Guerra de la Independencia, la novela está estructurada en un prólogo, cuatro partes tituladas compuestas de 58 capítulos y un epílogoUtilizando un narrador omnisciente en tercera persona, siguiendo un hilo cronológico lineal y con varios hilos argumentales (aunque el principal es el del protagonista, Julián), con un ritmo ágil que se convierte en vertiginoso en el último cuarto, con un estilo muy cuidado (en el que me ha sorprendido, sobre todo, la facilidad para que no se note en ningún momento la ardua labor de documentación que esta novela lleva aparejada y para hablarnos de la historia del país en otras épocas, pero aún más la forma de llamar nuestra atención con las «líneas huérfanas», un recurso que no recuerdo haber visto nunca, y si lo he hecho lo he olvidado, que hace que lo importante aún destaque más y que los giros y los golpes de efecto sean aún más intensos).La trama muy sólida, magníficamente construida, con todos los hilos bien urdidos y sin que quede ningún cabo por atar.Los personajes perfectamente caracterizados, con un protagonista indiscutible, Julián, un niño de dieciséis que ve como su padre es asesinado, y que vemos evolucionar a lo largo de la novela de adolescente a hombre hecho y derecho. Clara, que me ha conquistado el corazón, una niña de familia bien, amiga desde la infancia de Julián, y que se rebela contra la situación de la mujer en esa época.Aparte de un elenco de personajes sublimes, como los de Roman, Simón, Pascual, Teresa, Miriam.., que no son comparsas, sino una parte importantísima de la novela, tenemos al malo malísimo, al antagonista de nuestro «héroe», Le Duc, un general francés, perteneciente al servicio secreto de Napoleón, que es el que más juego da en la novela.La ambientación espectacular, con unas descripciones de la vida en la época y de los acontecimientos tan vívidas que he sufrido todas y cada una de las peripecias de los protagonistas.El desenlace, como ya he adelantado, con un giro magistral que cierra una novela completamente redonda. Y aunque lo sospeché, luego lo descarté, porque me parecía que era imposible que fuese lo que yo pensaba.Aunque a mí no me ha gustado, porque hubiese preferido cerrar la novela con otro (lo que no quiere decir que no sea bueno, porque es soberbio), pero soy así de rara, ¡qué le vamos a hacer!Y ahora viene lo que ha hecho que no tenga el 10 que se hubiese merecido: los nombres propios de animales en redonda, no en cursiva; he visto demasiados «el cual, la cual» y similares, que me han llegado a resultar cansinos (en algunos se podría haber utilizado perfectamente un «que»); lo del «quinceavo golpe», como dije ayer en Twitter, no se puede consentir (y más cuando cerca está bien puesto y se utilizan décimo y decimosexto); pero lo peor es que ha habido un momento en que me han fallado los tiempos (ni que fuese el de un elefante, no puedo decir más; los que lo hayan leído, lo entenderán; lo he comprobado un montón de veces y no me salen las cuentas, nunca mejor dicho, por ningún sitio).Resumiendo, que dice el Maestro: una novela histórica espléndida, con guerras, logias, venganzas, odios, envidias, aventuras y una historia de amor. Una obra muy bien escrita, con unos giros sorprendentes y con una intriga que nos mantiene enganchados a las páginas para saber más. ¿Quién es «la mujer del reloj» que da título a la novela? ¿Quién es realmente Le Duc? ¿Qué secreto esconde la familia de Julián? Déjate atrapar por un thriller histórico perfectamente ambientado, con todos los ingredientes mezclados en su justa medida y sumérgete en una historia que te cautivará, porque Julián y Clara son personajes que dejan huella.
Valoración: 9,5
Leído el 7 de febrero de 2016