Revista Opinión

la mujer occidental: ¿de vuelta al hogar? (2ª parte)

Publicado el 16 junio 2019 por Carlosgu82

continuación de mi anterior artículo:

la mujer occidental: ¿de vuelta al hogar?

veamos…

invito al lector en hacer una pequeña reflexión. una cuestión que sería: ¿cual es la máxima de todo gobierno? habrá quien diga que es el cuidado de sus ciudadanos, el poner su nación como potencia económica o algún motivo del estilo. pero la triste realidad es su preservación como estado, ya sea una democracia, república o incluso dictadura, su objetivo principal. el resto de razones, son y siempre serán algo secundario para «sus señorías los de arriba».

con ello en mente, se debe recordar la baja tasa de fecundidad en buena parte de países, exceptuando los pertenecientes al continente africano y algún foco aislado aquí y allí en el resto mundo. estudios recientes indican que para que una país se mantenga a flote durante 25 años aproximadamente, se requiere de un índice de fecundidad igual o superior a 2,11 hijos por mujer. con cualquier tasa menor, ese país y cultura decaerá. históricamente, con una tasa de 1,9 hijos por mujer, una nación o incluso un continente entero, entrará en declive y colapsará. una tasa de 1,3 hijos por fémina, es imposible de revertir, pues requiere de una corrección de entre 80 a 100 años de «baby-boom», y no existe modelo económico y social actual capaz de sostener eso. hay que cambiar las reglas, caiga quien caiga, duela a quien le duela. esto es algo que «sus señorías los de arriba» saben muy bien. europa por ejemplo, el continente mas afectado por la baja tasa de fecundidad, arrastra desde hace más de dos décadas un índice de 1,38 hijos por mujer. como se ha insinuado en más de una ocasión por los medios de comunicación, eso hace peligrar las pensiones por falta de población de reemplazo. pero no solo las jubilaciones (una verdad a medias), si no que peligra absolutamente todo, desde subvenciones, hasta el gasta sanitario y educativo, pasando claro está (punto importante) los sueldos y gasto político. todo. sus «señorías los de arriba» no van a permitir que sus nominas como dirigentes peligren por el hecho que a las mujeres les haya dado la vena de entrar en el mercado laboral, dejando a un lado el tema de la maternidad. ¿como lo harán? ese es el kit de la cuestión, que no importa el como, solo que el fin justifica los medios.

quien apoye la izquierda política se encuentra con ese multiculturalismo suyo de fronteras abiertas, trayendo entre otras cosas, esa religión musulmana que, de sobras es sabido, todo el mundo sabe cual es el rol de la mujer ahí. cada vez hay mas mezquitas en aquellos países europeos donde dejan entrar «a mansalva» la gente venida de países del oriente medio.

quien apoye la derecha política se encuentra con ese movimiento conservador pro-vida que los últimos años ha cogido bastante fuerza, además de la iglesia católica ortodoxa (otro dogma religioso tradicional) ya ha empezado en asomar las narices, como se insinuó con la reciente visita del presidente de la formación verde santiago abascal al líder conservador polaco Jarosław Kaczyński.

sea cual sea el camino escogido, el resultado en breves años será el mismo: aunque seguramente se respetarán a aquellas mujeres con talento, las cuales se gradúen y acaben siendo médicos, abogados y demás profesiones de cierto nivel, lo que no van a permitir «sus señorías los de arriba» que las mujeres estén por ahí haciendo trabajos tales como estar en fábricas, poniendo ladrillos o podando un árbol, mas todavía en la época actual de la automatización (donde cada vez se requiere menos personal) todo ello por no tener hijos y por ende buena parte del mundo occidental (y sus sueldos políticos) reviente por falta de población de reemplazo. que nadie caiga en el error de pensar que «sus señorías los de arriba», se quedarán de brazos cruzados ante la amenaza de perder sus privilegiados puestos, a cambio de tener mujeres obreras. quien leyó mi anterior artículo, el tema ya está puesto en marcha, apartando progresivamente a las féminas en lo laboral y social, para llegar a un punto en breves años donde se les pueda decir a las mas humildes «toma, un delantal y biberón, tus únicas alternativas».

llegados a este punto, cabe recordar que el tema de la igualdad aunque está muy bien como un ideal, realmente solo es algo bonito sobre el papel y mantenido durante un tiempo, como por ejemplo en casos de necesidad extrema (como lo sucedido en EE.UU durante al 2ª gran guerra, donde los hombres se fueron al conflicto mientras las mujeres los substituían en las fábricas), también en control de natalidad durante unas pocas décadas. no obstante, llega un punto donde lo básico y primario se impone, que unos son machos y otras son hembras, con lo que cada palo debe aguantar su vela, le guste o no. la biología impuesta por la madre naturaleza desde el inicio de los tiempos no podrá ser jamás cambiada por ninguna ley o ideología. nunca. esto es algo que «sus señorías los arriba» saben muy bien y no olvidan en ningún momento.

así que deseando el mejor de los futuros próximos para la mujer en este mundo, les dejo una «meme» con la que reflexionar un tiempo sobre el tema:

la mujer occidental: ¿de vuelta al hogar? (2ª parte)


Volver a la Portada de Logo Paperblog