Este es uno de esos cuentos maravillosos que consiguen transportarte a una época y a un lugar que no conoces pero que de repente se convierte en tu hogar y te envuelve de tal manera que piensas de verdad que has conocido a los personajes del libro, que has estado con ellos en esa atmósfera mágica y que no sabes cómo, al pasar la última página, has llegado de repente al sofá de tu casa.
Lo leí en inglés (ejemplar de la biblio), pero está editado también en castellano
La niña de nieve nos cuenta la historia de un matrimonio estadounidense de mediana edad que ha decidido empezar una nueva vida en Alaska, allá por los años 20. No están acostumbrados al clima, no tienen hijos que les puedan ayudar a trabajar las tierras que les han asignado y tampoco conocen a nadie en el lugar, así que les encontramos solos y algo desorientados en aquellas tierras inhóspitas, como muchos otros pioneros que llegaban allí buscando una oportunidad. Además, Jack y Mabel, que así se llaman, arrastran demasiados silencios entre ellos, demasiada culpabilidad, reproches que no se han llegado a decir pero que uno piensa del otro que siente, y de repente dan cuenta de que, además de estar en un lugar desconocido, también ellos son extraños para el otro.
Poco a poco van trabando amistad con algunos de los vecinos del pueblo (ser vecino allí significa que vives a pocos kilómetros) y se dan cuenta de que no están solos; que esa tierra requiere trabajar en equipo y que hay gente que está dispuesta a ayudarse entre sí, ya que son la familia que uno tiene cuando no tiene familia. Y así, un día después de visitar a estos nuevos amigos, Jack y Mabel hacen una muñequita de nieve a la puerta de su cabaña y… al día siguiente la muñeca no está, pero en su lugar una niña empieza a merodear por sus tierras, y de vez en cuando pasa un ratito con ellos.
Esta niña vive sola en el bosque, adentrándose en él en mitad de la noche como si tal cosa y, aunque pasa poquito tiempo con ellos cada vez y es más bien parca en palabras, el matrimonio se encariña con ella y casi sin darse cuenta comienzan a verla como a la hija que nunca tuvieron.
El libro plantea muchas preguntas, porque realmente no llegamos a saber si la niña es real o si, como dice la vecina de Jack y Mabel, el frío y la soledad les están pasando factura a su salud mental. Pero, ¿qué importa si algo existe o no cuando tú crees que sí, y además eres feliz con ello? Porque Jack y Mabel se sienten muy unidos a la niña, y parece que con ella han llegado a ser una familia completa. También destacan los demás personajes: esa familia vecina que son todo lo contrario a los tímidos e introvertidos Jack y Mabel y que llegan a sus vidas como un torbellino y están allí siempre para ayudarles, para asombro de la pareja. Esos desconocidos que al cabo de la primera visita ya los puedes considerar amigos, y sin los que la vida allí en Alaska no hubiera sido posible para nuestros protagonistas.
Y esa atmósfera en la que está inmersa la historia… Esa cabaña en mitad de la nieve, cerca de un río congelado; la tala de árboles del bosque en mitad de la noche, cuando en realidad es aún por la tarde; recoger las verduras a medianoche bajo la luz del sol en verano; la nieve, y la niña… No os lo vais a creer, pero leí La niña de nieve en mi pueblo, y durante dos días hizo bastante frío allí, en pleno agosto (lo suficiente para tener que estar dentro de casa, con jersey y pantalones largos) para luego, al terminarlo, volver de repente el verano. Yo creía que era yo la que viajaba dentro del libro, pero también el libro me envolvió un poquito a mí.
Siento que la reseña esté quedando tan larga, pero es que me ha gustado tanto…
Como sabéis, saqué mi ejemplar en inglés de la biblioteca, y ni siquiera sabía que estaba traducido al español; me he enterado ahora al escribir sobre él. Igual es que pasó despercibido en su momento, pero os aseguro que ha tenido bastante éxito en los países de habla inglesa. Yo conocí el libro gracias a la reseña de Leander y, si a alguien le apetece leerlo en versión original, que no tenga ningún miedo porque está escrito con un lenguaje sencillito; es como un cuento largo.
Pero, en cualquier idioma que queráis, apuntadlo en la lista y dejaos llevar a este mundo casi mágico. Os encantará.
Título: La niña de nieve Autor: Eowyn Ivey Editorial: Grijalbo Encuadernación: Tapa blanda con solapas ISBN: 978-84-253-4660-6 Páginas: 400 Precio: 18,90 € Propósito personal: No lo cumple Keep calm and read 20 books in English: 14/20