Laura CastañónDestino, 2017512 págs.Serie: autoconclusiva
Sinopsis
Valeria Santaclara necesita reunir la fuerza necesaria para abrir un sobre cerrado que está en su poder desde hace años y en cuyo exterior alguien ha escrito «El perdón». Para ello, y no por casualidad, acude a la consulta de la psicóloga Laia Vallverdú, quien a través de las sesiones de terapia la ayudará a recomponer el puzle de su existencia desde la infancia acomodada en el Gijón burgués de finales de los años 20, la relación conflictiva con su hermana, las circunstancias históricas de un tiempo convulso, y la culpa que vive en el fondo de su ser y cuya naturaleza última no es capaz de confesarse.
La noche que no paró de llover explora desde una triple vertiente los mecanismos del mal: el infligido de forma deliberada, el que jamás imaginaríamos haber causado y el que creímos ocasionar y que no fue tal. A través de la historia de Valeria Santaclara y de las vidas que se cruzan en ella, se van trenzando los destinos de todos los personajes, con el poder de la palabra como elemento redentor, y con la ciudad de Gijón como telón de fondo. Una novela sobre el mal, la culpa y la redención, y sus efectos sobre la vida de unos personajes náufragos en su propia memoria, en el marco histórico de los últimos cien años.
Opinión
Había leído varias reseñas muy positivas sobre esta novela, sabía que era diferente, llena de ese algo que gusta tanto y yo he podido ratificarlo, tiene ese componente especial que enamora, La noche que no paró de llover.
La historia la protagonizan varias mujeres: Laia, Emma, Valeria Santaclara y Feli. Cuatro mujeres opuestas en todo que nos van a ir contando su vida, sus inquietudes y todo lo que llevan dentro de una forma diferente. Laia es una psicóloga que actualmente vive en Gijón junto a su chica Emma. Tiene una consulta y allí un martes se presenta Valeria, una anciana que quiere hablar y que necesita poder abrir un sobre que su hermana le dejó antes de morir y ya hace quince años de eso, Valeria por fin reúne el valor para hablar de su inquietante vida a Laia. Emma mientras nos irá contando en propia voz mediante un diario su historia de amor y su vida actual con Laia, sus miedos, sus inseguridades y como poco a poco iremos conociendo la vida en común de dos mujeres tan distintas, pero que el amor ha unido poderosamente. Feli, por otro lado, es una mujer trabajadora y que se esmera en todo cuanto hace, quiere escribir una novela, pero tiene demasiados miedos y complejos para atreverse a ello. Cuida de su padre en silla de ruedas, y casualidad de la vida, trabaja en la residencia donde vive Valeria.
El gran peso protagonista es de Valeria sin duda alguna, pero Feli destaca por ese halo de inocencia y franqueza, de peculiaridad y sobre todo de nebulosidad que le rodea. No sabemos qué pieza es en esta historia, pero que cuanto más la conocemos más nos emocionamos con ella. Mientras que Laia y Emma nos embriagan con una historia de amor diferente y poderosa, un amor entre dos mujeres que dejarán su vida anterior para amarse y honrarse mutuamente a pesar de todo lo que pueda pasar ya que son una pareja peculiar. Una historia de amor preciosa, con sus momentos más crudos y trágicos y que regalan al lector momentos inolvidables, también divertidísimos con una Emma tan directa, tan real... contándonos sus problemas tan concretos y simples, que nos sentiremos muy a su vera, dándole fuerzas, ánimos y comprendiéndola mucho. Luego esta Laia, más lejana, más huidiza, pero que poco a poco encajaremos sus silencios, y sus miedos, una mujer de verdad, con ideas claras y con muchas ganas de encontrarse ella misma y saber que es lo que realmente quiere en su vida. Y todo esto narrado de una forma tan simple, tan fácil, tan de verdad que parece que Laura cuenta nuestra historia de amor, nuestra vida, nuestros desafíos y nuestras desilusiones. Una completa visión de la mujer en todos sus términos.
Laura Castañón ha construido una historia llena de genialidad por los cuatro costados. No es una lectura fácil ni tampoco complicada, es una lectura diferente, con una narración sublime y elegante, pero también a veces es confusa, no es concisa, es una prosa llena de emoción, de pasión por sentir, pura pasión por la vida; yo entiendo que la autora narra desde el corazón y a veces el corazón no sabe como decir las cosas y se rodea de dramas, historias y confusiones varias, para luego dar por fin con la clave. La historia en sí misma no cuenta nada original, es el mismo drama de siempre, la guerra civil, las tragedias que se vivieron pero contadas por una voz difícil, agresiva como es la de Valeria: una visión totalmente diferente a lo que habitualmente leo, algunas cosas difíciles de entender, pero que hay que conocer también. Aquí la visión la tiene Valeria, una mujer con unas fuertes convicciones de derechas, y que retoma los recuerdos de cómo vivió los amargos momentos del antes, del durante y después de la guerra civil en Asturias, y sobre todo cuenta la historia de su casa, de su familia, de su vida. Una niña y ahora anciana que lo tiene todo, excepto algo que todavía no tiene y que espera encontrar hablando con Laia, su psicóloga, y que sin darse cuenta un día dará con esa clave.
La novela es una novela de personajes. Aunque la trama es fundamental y cuanto más lees, más atrapada quedas, tanto de la excelente prosa de la autora como de la historia de Valeria y su miedo a descubrir la carta de su hermana. Los secretos y las almas perdidas albergan en esta historia. Los lazos de unión entre todas estas mujeres y esa noche que no paró de llover son unos momentos inolvidables e inesperados imposibles de intuir y que me dejaron sin habla. Hay también varios momentos terribles, que parten el corazón, pero como siempre digo, la vida es eso, seguir adelante, sobrevivir a ello y sobre todo, conseguir vivir en paz contigo mismo y sin remordimientos y que luego el destino y el azar cumpla su cometido. Y en esta historia se refleja eso: esos momentos vitales que se quedan grabados, adentro, que no salen y que se quedan enquistados dentro, pero que el destino loco hará que todo fluya. Una muy buena novela intimista, incuestionable en su mensaje y que recomendaré sin duda. Una obra diferente que se tiene que leer despacio, saboreando y analizando cada detalle. Una obra llena de palpitantes emociones, muy diferentes y que me ha dejado con muchas ganas de más de mi tocaya Laura, su autora. Por cierto, una bonita metáfora, en mi humilde opinión, la del título.Recomendado:Sí, por lo diferente y especial que es