Revista Cultura y Ocio
La novela que desencadenó la abolición de la esclavitud: La cabaña del tío Tom
Publicado el 08 mayo 2010 por Carol
La cabaña del tío Tom de Harriet Beecher Stowe es una novela que fue publicada en EE.UU. en 1852, un dato que no debemos olvidar en ningún momento mientras la leemos. La novela es hija de su tiempo, y como tal hay que leerla. En su momento supuso todo un alegato abolicionista contra la esclavitud, a pesar de que el tono general del relato es en demasiadas ocasiones racista y condescendiente hacia la raza negra. A pesar de ello Beecher Stowe consiguió en su época lo impensable, la novela fue el segundo libro más vendido de su época -por detrás de la Biblia-, consiguió reunir las firmas de cientos de mujeres británicas para que se aboliera la esclavitud en EE.UU. e incluso el presidente Abraham Lincoln recibió a la escritora en la Casa Blanca y la saludó con unas palabras que han quedado para la posteridad: "¡Así que usted es la mujercita que escribió el libro que ha desencadenado esta gran guerra!", en referencia a la Guerra de Secesión que dividió al Norte y al Sur. No todos parecieron disfrutar tanto de la novela, en los estados sureños se armó un buen revuelo, e incluso los profesores tenían derecho en las escuelas a hacer jurar solemnemente a sus alumnos que jamás leerían La cabaña del tío Tom. Más grave fue cuando un plantador sureño envió a la escritora un paquetito que contenía la oreja cortada de uno de sus esclavos negros, como amenaza contra ella. Aparte de todo esto, que no es poco, pues pocas novelas pueden presumir de haber armado tanto revuelo y haber dado tanto que hablar, La cabaña del tío Tom es una magnífica novela que ha sido ninguneada en muchas ocasiones por la crítica y bastante maltratada por el paso del tiempo. El hecho de que Harriet Beecher Stowe fuera mujer tampoco ha ayudado mucho, ya que en su época se le criticó que tratara en su novela temas tan duros como la violación a esclavas. Para la mentalidad victoriana de la época era impensable que una mujer expusiera este tema a plena luz del día a pesar de que era algo sabido por todos. La cabaña del tío Tom nos muestra en toda su crudeza los padecimientos que viven los esclavos negros, a través principalmente del personaje del tío Tom, un hombre bueno y muy religioso que es apartado de su mujer e hijos para ser vendido en el Sur a diferentes amos que le maltratan e intentan aniquilar su dignidad de ser humano. Alrededor de él se mueven numerosos personajes a los que vemos cómo violan, pegan, maltratan, separan de sus hijos e inducen a la locura, en una continua venta de seres humanos. Algunos de los esclavos consiguen escapar, pero para la mayoría, el infierno es inevitable. La novela está escrita con un estilo ágil que hace que las páginas vuelen con facilidad, aunque como comentaba antes, el paso del tiempo ha hecho mella sobre ella. Algunos comentarios de la escritora nos resultan hoy en día sumamente ofensivos, aunque hay que reconocerle que ella no lo hizo con mala intención, y que escribió la obra como vehículo propagandístico para la abolición de la esclavitud, por lo que el estilo tiene que ser lo más panfletario y sentimental posible para poder llegar al corazón de los lectores. Además, las manifestaciones de fervor religioso de la escitora llegan a ser abrumadoras y excesivas en ocasiones, así como su absoluta fe en la mujer y en el poder del amor de la figura de la madre y ama de casa, como vehículo para conseguir un mundo mejor. A pesar de ello, La cabaña del tío Tom es una novela fundamental para entender cómo se vivía en aquella época la esclavitud y cómo lo veían de primera mano los estadounidenses.