Las empresas se muestran cada vez más interesadas en servicios virtuales
Los servicios virtuales pueden ahorrar espacios en los disco duros de las computadoras, tabletas y celulares. La computación en nube llegó para quedarse. Así lo afirman varios expertos en tecnología que ven con entusiasmo cómo los venezolanos han ido entendiendo que a la cloud computing no hay que tenerle miedo. Contrario a eso, puede ofrecer muchos beneficios.
De hecho, 34% de las empresas venezolanas ya están “sumergidas” en la nube, siendo las pequeñas y medianas empresas las más dispuestas a hacerlo. Los sectores empresariales que muestran mayor interés son banca, manufactura, telecomunicaciones, farmacéuticas, transporte y medios.
“El camino es la nube”, explica Juan Caraballo, gerente de Mercadeo, Soluciones de Servidores y Herramientas de Desarrollo de Microsoft Venezuela. “Actualmente no hay empresa que no manifieste interés en algún servicio de nube que se ofrezca en el país”.
Este interés, que ha venido tomando auge desde hace más de un año y tuvo un pico en los últimos tres meses, se debe a la rapidez y a la flexibilidad que ofrece la nube tanto para usuarios personales como a consumidores empresariales.
Se conoce a la computación en nube como un conjunto de recursos tecnológicos entregados, de manera pública, privada o mixta, como un servicio que se utiliza o almacena de manera virtual haciendo uso de las telecomunicaciones, es decir, no ocupa espacio físico o memoria en los discos duro. El usuario solicita el tipo de nube dependiendo de sus necesidades y el servidor es el que controla el sistema. Un correo electrónico es un ejemplo de ello.
Algunas soluciones que ofrece la computación en nube son más rapidez de adaptación para los centros de datos y redes virtuales, plataformas para la creación de aplicaciones y programas ya instalados que cualquier persona puede guardar y utilizar en un espacio asignado en la web.
Según Caraballo, lo más solicitado son los servicios de software ya que son conceptos que muchas personas ya dominan, vienen listos para su uso y pueden ser utilizados desde cualquier dispositivo en cualquier lugar.
Limitantes
Juan Manuel Romero, quien lidera actualmente las iniciativas de cloud computing de Hewlett-Packard (HP) alega que la computación en nube está pasando actualmente por un proceso de adaptación, por lo que no duda que todavía varias personas sientan desconfianza con los servicios.
“Ocurrió algo parecido con los bancos cuando empezaron”, explica Romero. “Nadie quería darle el dinero propio a una persona ajena hasta que comprendieron que era la mejor opción”.
Pero por mucha confianza que puedan adoptar los venezolanos con el uso de la nube, todavía quedan algunos obstáculos que, a juicio de Romero, quedan pendientes.
Romero explica que el tema de los dólares puede dificultarle el uso de la nube a los venezolanos, que cuentan con un control de cambio.
Una infraestructura virtual puede tener un costo de 50 dólares mensuales, mientras que una base de datos de 10 gigabytes puede costar alrededor de 10 dólares. Microsoft alega estar trabajando para ofrecer el pago en bolívares.
De hecho, las grandes empresas son todavía reacias a adoptar una plataforma digital ya que ya tienen una estructura física ya montada, poseen más salida de dinero y más controles. Las pequeñas y medianas empresas son más confiadas y no tienen tantos gastos.
“Por eso es que muchas empresas empiezan por probar el sistema híbrido”, indica Caraballo. “Empiezan por almacenar solo una parte de la información en la nube. Una vez que la prueban definirán si es lo que necesitan y cuál es el servicio que quieren”.
Independientemente del resultado, la computación en nube promete un futuro libre de grandes máquinas que ocupan espacio físico, problemáticas cantidades de cables y costosos mantenimientos.
Romero confía en que las limitantes harán que surjan propuestas “interesantes” en el tema de computación en nube en el territorio venezolano.
“Es una tendencia irreversible”, afirma por su parte Caraballo, quien explica que la gran cantidad de dispositivos harán que prolifere el uso de la nube, tanto para computadoras como tabletas y smartphones. “La nube se quedó en Venezuela”.