La nueva línea de autobronceadores Lancaster te ofrecen un bronceado a la carta

Llega el sol, el buen tiempo y es hora de comenzar a acortar mangas, lucir escotes, piernas y descubrir con cierto desagrado lo poco favorecedor que nos resultan los nuevos modelos primaverales con la piel tan blanca, tapada como estuvo durante toda la época invernal.
La solución es bien sencilla, o bien recurrir a unas sesiones de rayos uva o aplicarnos un buen autobronceador.
Si la primera opción la rechazas, bien por economía o porque no estás muy convencida de que sus efectos sean beneficiosos, los autobronceadores pueden ser la solución perfecta para conseguir un tono bronceado natural, propio de unas auténticas vacaciones al sol.
Lejos están aquellos inicios en los que este tipo de cremas conseguían convertir nuestra piel en lo más parecido a una zanahoria, por su tono, aunque bien es cierto que marcando la tendencia de lo que en aquel momento significaba lucir un buen bronceado, que no era ni más ni menos que eso, lucir un tono de piel anaranjado o un moreno como suele decirse “como un tizón.”
La evolución de las cremas autobronceadoras es evidente, y así lo demuestra la nueva línea de Lancaster, que nos proporcionan un resultado final con un bronceado de un tono natural, sin mal olor y por supuesto, sin efecto naranja. Porque ahora es lo que buscamos, conseguir un bronceado sutil, el conocido ocmo “au-tan”, es decir, de otońo, ese que nuestra piel adquiere con los paseos bajo el sol y que le proporciona un matiz natural.
Pero a pesar de todos los avances en cuanto a autobronceadores se refiere no debemos olvidar que antes de aplicarlos debemos seguir un ritual imprescindible, como es exfoliar e hidratar la piel para aplicar el producto posteriormente, extendiéndolo hasta que se absorba completamente, y no olvidando aplicar menos cantidad en codos, tobillos y rodillas.

La línea de autobronceadores de Lancaster nos ofrece tres gamas, disponibles tanto para la cara como para el cuerpo, productos completamente “a la carta” que se acomodan a nuestros requisitos y al tono de bronceado que buscamos.
De este modo si nos apetece un tono ligero como si hubiésemos estado disfrutando de unas glamurosas vacaciones por el Mediterráneo, Capri será sin duda quien conseguirá broncear nuestra piel de forma suave, resultando ideal para personas con la piel clara. Ibiza nos proporcionará un tono medio y luminoso, y Copacabana hará que nuestra piel luzca un bronceado tan intenso como si disfrutáramos todo el ańo de largos paseos por las maravillosas playas brasileńas.